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La mayoría de las constructoras son pequeñas y medianas empresas.
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Este 2020 la emergencia sanitaria por el Covid 19 debilitó mucho más a la industria.
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Se espera que el PIB de la construcción caiga 18.5%, producto de su desaceleración.
La mayoría de las empresas de la construcción son pequeñas y medianas y este 2020 enfrentan uno de sus peores años en décadas.
La emergencia sanitaria por el Covid 19 detuvo sus operaciones al inicio de la pandemia, lo que los ha llevado a acumular una pérdida de 120 mil empleos.
De acuerdo con las estimaciones, será muy difícil que estas plazas laborales logren recuperarse en 2021.
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Problemas en la industria de la construcción
A pesar de la reactivación de obras, no existe un repunte en la industria de la construcción debido a las demoras en el otorgamiento de permisos.
Además, muchos proyectos fueron postergados ante la falta de liquidez por la que atraviesan algunas firmas.
En los últimos dos años, la construcción se ha venido debilitando y la pandemia de Covid 19 solo vino a empeorar el panorama.
Pues, las empresas constructoras son en su mayoría pequeñas y medianas y enfrentan actualmente uno de los peores años en décadas.
Se espera que para el cierre del cuarto trimestre del año, el PIB de la construcción caiga 18.5%, como señal de que la recuperación de la industria se desaceleró en la última parte del 2020.
Recuperación será lenta para el sector
Eduardo Ramírez Leal, presidente nacional de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC), explica que aún existen “varios cuellos de botella” para la reactivación del sector.
Tales como trámites y permisos, además de que se debe agilizar la asignación de presupuesto para obra pública y aprovechar el interés del sector privado para invertir en infraestructura.
Una de las preocupaciones más grandes de la CMIC es que para septiembre, apenas hay registro de un 25% del total de presupuesto en contratos para obra de este año.
Jorge Arganis Díaz, titular de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, explicó que para apoyar a la industria de la construcción, se decidió impulsar más inversión pública en el sur-sureste del país.
De acuerdo con la CMIC, la construcción del Tren Maya hasta noviembre de 2020 lleva un avance de 66.2% del presupuesto contratado para la obra, seguido del Corredor Interoceánico con 52% de recursos ejercidos.
Mientras que la Refinería de Dos Bocas con el mayor presupuesto asignado este 2020, apenas tiene 12.8 % de avance en monto contratados.
En el caso del Aeropuerto de Santa Lucía el avance es de 19.5%. Todas estas obras insignia del gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador.