-
A nivel global, Somalia es percibido como los paĆses mĆ”s corruptos del mundo, seguido de SudĆ”n del Sur y Siria, segĆŗn Statista.
-
Uruguay fue percibido en 2022 como el paĆs menos corrupto de AmĆ©rica Latina y el Caribe.
-
SegĆŗn el INEGI, mĆ”s del 60 por ciento de los mexicanos considera que la corrupciĆ³n ha aumentado significativamente en los Ćŗltimos aƱos.
Los factores polĆticos y econĆ³micos desempeƱan un papel crucial en la perpetuaciĆ³n de la corrupciĆ³n, y es que con factores como la falta de regulaciĆ³n efectiva y la impunidad contribuyen a la normalizaciĆ³n de prĆ”cticas de este tipo.
En ese sentido, MĆ©xico se encuentra inmerso en una realidad donde la corrupciĆ³n no solo persiste, sino que se ha arraigado en la cotidianidad de la vida. Las estadĆsticas alarmantes revelan que aproximadamente siete de cada diez mexicanos han experimentado directa o indirectamente algĆŗn tipo de corrupciĆ³n. Este dato impactante seƱala una normalizaciĆ³n que va mĆ”s allĆ” de incidentes aislados.
El Ćndice de PercepciĆ³n de la CorrupciĆ³n constituye un marcador que refleja las puntuaciones otorgadas a cada naciĆ³n en categorĆas como sobornos a funcionarios pĆŗblicos, corrupciĆ³n en la contrataciĆ³n pĆŗblica, desvĆo de fondos pĆŗblicos y eficacia de las medidas anticorrupciĆ³n implementadas por los gobiernos. La calificaciĆ³n Ć³ptima en este Ćndice es 0, mientras que un puntaje de 100 indica la ausencia total de percepciĆ³n de corrupciĆ³n en el paĆs evaluado. SegĆŗn los resultados mĆ”s recientes, Uruguay destacĆ³ como el paĆs con menor percepciĆ³n de corrupciĆ³n en AmĆ©rica Latina y el Caribe para el aƱo 2022, alcanzando una puntuaciĆ³n de 74. Esto significa que la repĆŗblica oriental casi duplica la puntuaciĆ³n promedio de la regiĆ³n, establecida en 40 puntos en este Ćndice.
Si nos enfocamos a nivel global, Somalia se sitĆŗa en la posiciĆ³n de ser considerado uno de los paĆses mĆ”s afectados por la corrupciĆ³n a nivel mundial, seguido de cerca por SudĆ”n del Sur y Siria, ambos con una puntuaciĆ³n de 13. Los aspectos evaluados para calcular la percepciĆ³n de los niveles de corrupciĆ³n incluyen el soborno a funcionarios pĆŗblicos, las comisiones en procesos de contrataciĆ³n pĆŗblica, la malversaciĆ³n de fondos estatales y la efectividad de las medidas implementadas por el sector pĆŗblico para combatir la corrupciĆ³n.
CorrupciĆ³n, una normalidad para 7 de cada 10 Mexicanos
De acuerdo con Mexicanos Contra la CorrupciĆ³n e Impunidad, 2 de cada 3 personas consideran que es inĆŗtil denunciar la corrupciĆ³n en nuestro paĆs, por ello, no es sorprendente que numerosos expertos coincidan en que prĆ”cticas como el soborno o la “mordida” sean consideradas como soluciones a los problemas cotidianos que enfrentan los mexicanos.
Desde la perspectiva de la International Organization for Standardization (ISO), el soborno se configura como un riesgo considerable para los negocios en diversos paĆses y sectores. Este fenĆ³meno puede oscilar entre gestos aparentemente menores, como el pago a un oficial de policĆa para evitar una multa por exceso de velocidad, hasta transacciones mĆ”s complejas, como el pago para asegurar un contrato de importancia significativa.
Aunque para algunos, un acto de soborno pueda parecer un delito menor, la corrupciĆ³n sistĆ©mica en distintos niveles tiene consecuencias amplias y graves. Estas consecuencias impactan negativamente en el crecimiento econĆ³mico, desincentivan la inversiĆ³n y contribuyen al aumento de la pobreza y la desigualdad social.
A pesar de los esfuerzos multifacĆ©ticos dirigidos desde diversas perspectivas, los expertos actuales sostienen que la erradicaciĆ³n de este problema es y seguirĆ” siendo un desafĆo formidable. Un reciente estudio de Mexicanos Contra la CorrupciĆ³n e Impunidad, titulado “ĀæCambiar para seguir igual?”, mencionĆ³ que, aunque se atribuye mĆ”s responsabilidad al gobierno, la ciudadanĆa percibe que otros actores deben participar activamente para abordar la corrupciĆ³n en MĆ©xico.
A nivel global, el Banco Mundial estima que se pagan mĆ”s de $1 billĆ³n de dĆ³lares al aƱo en sobornos, lo que equivale al 3 por ciento del PIB mundial. En muchos casos, esta prĆ”ctica se tolera como una parte necesaria para “cerrar el trato” o para sortear trĆ”mites burocrĆ”ticos. Este escenario revela la complejidad y persistencia del problema a escala internacional.
Un amplio nĆŗmero de naciones ha introducido o fortalecido la legislaciĆ³n contra el soborno, convirtiĆ©ndolo en una infracciĆ³n tanto para organizaciones como para individuos. Sin embargo, en la actualidad, la Iniciativa Privada a nivel global estĆ” tomando la iniciativa con la norma ISO 37001, Sistemas de GestiĆ³n Antisoborno.
Esta iniciativa contribuye de manera significativa a la confianza y percepciĆ³n que se tiene sobre las empresas, como lo evidencia el Trust Barometer 2023 de Edelman. SegĆŗn este informe, las compaƱĆas son consideradas las instituciones “mĆ”s competentes y Ć©ticas”, superando al gobierno por 66 puntos en competencia y por 39 puntos en Ć©tica.
La ISO 37001 representa una norma que incorpora una serie de buenas prĆ”cticas reconocidas internacionalmente en la lucha contra el soborno. Lo notable de esta norma es que puede ser implementada y certificada por todas las empresas y organizaciones, independientemente de su tipo, tamaƱo o naturaleza de negocio o actividad. Esto incluye tanto a entidades pĆŗblicas como privadas, asĆ como a las organizaciones voluntarias de los sectores sin fines de lucro.
āSe trata de medidas muy concretas, con un liderazgo desde la parte superior de la empresa, y que incluyen la formaciĆ³n, la evaluaciĆ³n de riesgos, la debida diligencia, los controles financieros y comerciales, la presentaciĆ³n de informes, auditorĆa e investigaciĆ³nā, explicĆ³ Carlos PĆ©rez, director general de NYCE MĆ©xico.Ā