A través de redes sociales, el usuario de Facebook, EliUu Linho denunció que durante el fin de semana fue desalojado del negocio local Cervecería Transpeninsular, ubicado en Ensenada. La justificación de este hecho, que fue celebrado por otros clientes que se encontraban en el lugar, fue que dicho usuario portaba la chamarra “Mexico is the shit” que durante el año pasado ganó popularidad como parte de un movimiento que pretendía enaltecer a México en medio de diversas coyunturas políticas, sociales y culturales.
La denuncia se materializó en un video publicado en Facebook que, hasta este momento, cuanta con más de 4.1 mil reacciones y ha sido compartido más 5 mil 289 veces.
El hecho ocurrido el pasado fin de semana, recuerda el caso de la priista Tania Larios, quien a principios del año pasado protagonizó una serie de críticas en redes sociales cuando mediante su cuenta de Twitter criticó al Hotel Hábita por recibir “a personas que insultan al país”, término que utilizó para hacer referencia a dos jóvenes que portaban la ya conocida prenda.
Ambos casos ponen en duda la capacidad de la estrategia de comunicación y mercadotecnia que gira alrededor de la aún popular chamarra.
Cómo es posible qué un hotel mexicano reciba a este tipo de gente que insulta a nuestro país @GRUPOHABITA (en este momento condesaDf) pic.twitter.com/xSsKP7IXRl
— Tania Larios (@lariostanian) 14 de marzo de 2017
Cómo es posible qué un hotel mexicano reciba a este tipo de gente que insulta a nuestro país @GRUPOHABITA (en este momento condesaDf) pic.twitter.com/xSsKP7IXRl
— Tania Larios (@lariostanian) 14 de marzo de 2017
Desde su aparición y durante el punto más alto su popularidad, los creadores de la peculiar prenda aseguraron que su diseño intentó ser un movimiento para demostrar el orgullo de ser mexicano, así como exaltar la capacidad que tiene el país para sobresalir.
No obstante, aún a un año de su lanzamiento, parece que la comunicación alrededor de la prenda no ha sido clara. El mayor problema es la traducción literal que muchos usuarios hacen de la popular frase que ha caracterizado a la sudadera.
La brecha en dicho asunto, representa una gran oportunidad para la marca que aún conserva popularidad y genera interés sobre todo entre los consumidores más jóvenes. El gran activo que está en riesgo es la percepción sobre lo que representa y comunica la marca, elemento que es fundase tal al momento de diseñar acciones que favorezcan la experiencia de marca.
De acuerdo con un reporte de CMO, las percepciones emocionales dan acceso a las respuestas auténticas y inconscientes de los clientes a las experiencias de marca y conectan con los matices de la emoción que la menta consciente no puede compartir.
Este asunto gana relevancia si consideramos que que, tal y como refiere el estudio Customer Experience Impact Report, más el 60 por ciento de los consumidores está dispuesto a pagar más por un producto o marca que ofrezca una buena experiencia más allá del uso per se de los mismos.
La lección parece clara. Nunca se puede dar por hecho que el consumidor entiende lo que nuestra marca desea comunicar. Verificar que el objetivo de la comunicación coincide con la percepción del público meta y audiencias terceras es vital para garantizar el buen desarrollo de las estrategias de mercadotecnia y comunicación.