Por Camila González
@camilaglz
Correr puede significar ir muy rápido, muy rápido, o simplemente ir; todo depende de los anteojos y el encuadre. De la videoteca Huellas de la publicidad tengo tres anuncios que corren, a su ritmo y según cada necesidad de mensaje. A ver qué nos dicen y para qué los pusieron a correr…
Las escenas que tejen este spot de leche invitan a algo que nada tiene que ver con leche, propone una urgencia, sugiere la prisa desmesurada de cuando algo grave sucede, sin embargo la hipérbole utilizada sella un mensaje acerca del amor inmoderado e incondicional de las madres.
Para algunos quizás esta caricatura que retratan los creativos de Tetra Pak ridiculiza a las mamás, para otros el aviso las hace más perfectas de lo que son, quién sabe.
Como sea, lo cierto es que al final lo que sí logran este tipo de exageraciones es capturar la entera atención y sorprender. Lo de las madres, la posible exaltación a su labor, es apenas un pretexto para darle nivel de calidad y de amor a una marca envases y a su contenido, en este caso la leche.
Correr también es ejercitarse, y en el caso de este anuncio de Raisin Bran, Kelloggs deja clara la referencia a la salud, a cuidarse el cuerpo y el alma, y a querer la vida. Pero las imágenes actúan por sí mismas, el verdadero mensaje lo hace la voz de un locutor que en off nos recomienda la marca y nos extiende sus bondades de forma directa y clara, sin dejarle mayor trabajo a nuestra mente.
De las imágenes de lucha diaria de cada cual, en su tarea, en sus más entrañables retos y su misión para estar acá, se vale Ford para simular que la vida es una carrera, un corre corre en el tiempo. Lo que sugiere la marca de automóviles, sin dejar de acariciar, por supuesto, la fibra sensible con la evocación del batallar humano, es que si queremos ir a buen ritmo, inclusive rápido y a través de cualquier situación que se nos presente, ahí está Ford para servirnos…