Con horror nos enteramos de un nuevo tiroteo en USA, ahora en Uvalde, condado de Texas, conformado en su mayoría por habitantes de origen hispano y en donde perecieron 19 niños de primaria y dos profesoras que hasta el último momento trataron de defender a sus alumnos.

El lamentable caso ha tenido repercusión mundial y trae consigo, de nueva cuenta, la aparición de la red temática llamada: seguridad y control.

La situación, pese a su dramatismo, es pertinente y cabe dentro del análisis para nuestros lectores de Merca2.0 , toda vez que estas acciones redundan en las políticas públicas de todo gobierno que a su vez impactan a los programas de comunicación y marketing político.

Es este un issue, de gestión de gobierno , que debería ser virtuoso y no tortuoso. Por supuesto que no hablaremos de los detalles del lamentable suceso sino del fondo del mismo que debería a apuntar ( nunca a ciudadanos inocentes), a políticas sostenibles que encuentren una solución definitiva.

El tema del control de armas en los Estados Unidos no viene de ahora con Joe Biden; es una situación que data más allá del gobierno de Ronald Reagan y que el Congreso Federal y las autoridades locales han venido revisando sin atinar a apretar con fuerza el botón de la regulación, reconociendo que la industria de la armas en USA , es una de las más poderosas y de las que más gasta en cabildeo para beneficio de su sector.

La pregunta entonces es ¿Cuál es la ruta a seguir?

En lo personal considero que el nombre de la estrategia se llama cabildeo efectivo en donde todos, ciudadanos, autoridades e industria, pudieran llegar al acuerdo denominado: ganar-ganar.

Partamos de la base que este tema divide en dos a las USA. El actual Presidente Americano, ha pedido al Congreso que impulse una legislación para prohibir las armas de salto y los cargadores de alta capacidad. También ha solicitado que se aborde el sistema de verificación de antecedentes a la hora de comprar un arma de fuego, especialmente porque se entregan a personas que no deberían tener una, como es el caso del joven, Salvador Ramos de 19 años, quien fue el responsable de la matanza de ayer.

Como sabemos, existen en los Estados Unidos, las 10 enmiendas a su Constitución que regulan la convivencia en aquél vecino país y en la segunda, aprobada en el año de 1791, se contempla el uso de las armas; no son pocos los que piensan apoyados en la misma legislación que dicen:¨Un arma no es para matar gente sino para defenderte¨. Otros dicen, ¨ Un automóvil como tal, no es peligroso a pesar de que también puede ser utilizado para matar a otras personas¨.

Como podemos ver, tenemos argumentos a favor y en contra situación real que debe llevar a los cabilderos de la industria de las armas y las autoridades a negociar teniendo en mente la seguridad de los ciudadanos.

El mensaje de Joe Biden a sus conciudadanos la tarde del martes lo encierra todo:

– ¨¿Dónde, en el nombre de Dios, está nuestro carácter para tener la fuerza necesaria para enfrentar esto?¨-

Nos encontraremos más adelante.