México es uno de los países más vulnerables a los efectos del cambio climático debido a su ubicación geográfica, lo que representa grandes retos que solo pueden ser resueltos con la ayuda de acciones coordinadas, creativas y con visión a largo plazo.

A causa de la deforestación, el país registra una pérdida anual de 155 mil hectáreas, según estimaciones de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).

Términos como cuidado al medio ambiente, cambio climático, crisis hídrica, aprovechamiento de recursos y consumo sustentable, forman parte del ideario general, y todos ellos son parte de una tendencia de consumidor con propósito.

En un estudio realizado por Seguros SURA, 68% de las personas encuestadas prefiere recibir su póliza digital a fin de no generar costo ambiental.

Se estima que en México se producen al año 22 millones de toneladas de papel y poco más del 80% viene de papel reciclado. El casi 20% restante se obtiene de árboles tanto nacionales como extranjeros, importándose la celulosa, materia prima para fabricar papel, en este último caso, según lo reporta el sitio del Centro de Información y Comunicación Ambiental de Norte América, A.C.

Hoy por hoy, la democratización de la información, así como la conciencia social acerca de la Tierra y el entorno, trae consigo factores clave, tales como el consumo responsable, ética en el consumo y responsabilidad social en la toma de decisión de compra.

Sin embargo, los temas medioambientales no sólo corresponden a los segmentos individuales o familiares, sino también al mercado organizacional, dado que el medio ambiente y su interacción tiene impacto en los objetivos estratégicos de las organizaciones.

Por lo anterior, contemplar medidas y estrategias en la gestión de tendencias y riesgos, que puedan afectar a la organización en temas medioambientales se ha vuelto muy importante, para brindar un panorama amplio a los clientes, no solo de los riesgos, sino de las oportunidades, que podemos ofrecer como negocio.

Las marcas y organizaciones tenemos el reto de aprovechar esta oportunidad, a fin de contribuir con el entorno y potenciar la capacidad de bienestar, competitividad y sostenibilidad de nuestros clientes.