El conflicto entre el gobierno federal, los pobladores de Mexicali y Constellation Brands parece que comienza ver su fin.
Durante la conferencia matutina de este miércoles, el presidente la República Mexicana, Andrés Manuel López Obrador, reveló que la planta cervecera que Constellation Brands planea fincar en Mexicana podría reubicarse, luego de que este primer plan fuera rechazado tras un consulta popular.
A esta conclusión se llegó luego de que Obrador sostuviera un reunión con los líderes de la firma, en donde se acordó comenzar la búsqueda de un nuevo sitio para instalar la planta antes de “recurrir a los tribuales”.
Los antecedentes
A pesar de una inversión cercana a los mil 400 millones de dólares y luego de los resultados de la consulta, la subsecretaria de Desarrollo Democrático, Participación Social y Asuntos Religiosos, Diana Álvarez Maury, indicó que la Comisión Nacional del Agua (Conagua) no otorgará los permisos correspondientes para operar la planta y el gobierno federal se pondrá en contacto con la empresa para subsanar los daños.
Esto se dictaminó luego de que una consulta popular tuviera un resultado en contra de los intereses de la empresa que opera marcas como Corona en Estados Unidos. En detalle, se estima que de los 36 mil 781 votos, el 76.1 por ciento votó en contra, 23.2 por ciento apoyó la construcción mientras que 0.7 por ciento fueron votos nulos.
Luego de esta decisión, se especuló sobre una posible acción legal por parte de la firma, misma que a decir de un análisis realizado por la empresa Ansley, pudo haberse dado en el marco del sistema mexicano o bien alrededor del aún vigente TLCAN o el futuro T-MEC.
Una posible demanda
De esta manera, tres podrían ser las líneas de acción de una demanda legal:
La empresa podría demandar por la caída de sus acciones y cobrar el más de 10 por ciento de valor ocasionada por la consulta realizada por el gobierno federal en el que los ciudadanos rechazaron la construcción de la planta.
Adicional, como se indica en el informe, se podría presentar ante el sistema judicial mexicano “un amparo en contra de los resultados de la consulta, la obligatoriedad de sus resultados o de cualquier decisión que el gobierno pueda tomar contra sus intereses, basados en los resultados de dicha consulta”.
Por último, de acuerdo con el capítulo Inversionista-Estado del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), ampara las acciones legales de una empresa contra el gobierno al resultar afectada por la expropiación indirecta, trato nacional, discriminación, nivel mínimo de trato, pro ejemplo, con lo que, Constellation Brands “podría considerar tanto las disciplinas originales del TLCAN, que son más claras para el inversionista, o incluso las del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC)”.
Luego de la reunión celebrada esta semana, misma que se dio “en un ambiente de respeto” a decir del presidente, el mandatorio retiró que se están buscando opciones para encontrar un nuevo espacio en el que se pueda construir la planta que en Mexicali ya tenia un avance del 70 por ciento con un a inversión, que según el Consejo Coordinador Empresarial, ya sumaba los 900 millones de dólares.
Las reacciones en la Bolsa
Luego de que la semana pasada se anunciarán los resultados de la consulta ciudadana que frenó el avance de la construcción de esta planta, las acciones de la firma estadounidense se desplomaron en la Bolsa en un 14.28 por ciento para alcanzar un valor de 105.42 dólares por título, de acuerdo con cifras entregadas por Bloomberg. La caída es importante si consideramos que este escenario de pérdidas no se había registrado desde enero de 2015, cuando sus acciones se encontraban en los 114.75 dólares.
El sector financiero no fue el único en reaccionar. La Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) solicitó anular la consulta al asegurar que se llevó a cabo en medio de irregularidades como la coacción del voto y acarreo de personas a cambio de dinero.
Ahora, con el anunció de una posible reubicación, la Bolsa también reaccionó. Los títulos de Constellation Brands vieron disminuido su valor en 2.74 por ciento en la Bolsa Mexicana, caída que aunque no es pronunciada, si deja en claro la incertidumbre que los accionistas leen en este proceso de reubicación.