A través de consejos muy prácticos puedes mejorar tus habilidades sociales y quitarte esa etiqueta de tímido o introvertido con la que has tenido que cargar toda la vida. Es un proceso lento y seguro que al principio te costará trabajo, pero una vez que comiences a intentarlo te darás cuenta de que tu habilidad para romper el hielo con los demás cada vez se irá haciendo más fuerte.
Antes de seguir, debemos hacer una clara diferencia: no es lo mismo ser una persona tímida a ser una persona introvertida. Los tímidos son los que se sienten incapaces de hacer una vida social y les atemoriza estar ante un grupo numeroso de personas. Los introvertidos tienden más a la reflexión y disfrutan de tener un círculo muy íntimo de amigos.
Quizás seas feliz siendo una persona tímida o introvertida y has ido por la vida a un paso distinto al del resto. Pero hay que decir de manera muy clara que muchas veces en la vida profesional hay que salir de ese círculo de placidez que da la soledad para intentar ser un poco más sociable. No para que todos te conozcan ni para que seas el alma de la empresa. La habilidad social te permitirá más bien desempeñarte mejor y crear alianzas para que el trabajo en equipo sea más sencillo.
Primero asume un reto que crees que puedes superar
Para que puedas progresar en tu intento de mejorar tus habilidades sociales, es aconsejable que vayas superando retos “sencillos”. Esto se refiere a que hagas el intento de ir rompiendo el hielo con los demás y que te animes a iniciar conversaciones en momentos donde antes no lo harías. Igualmente, haz el intento de participar en actividades que te exijan interactuar con los demás. Al superar esos retos irás ganando confianza y valentía para progresar en esta transformación.
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Contradice a tus pensamientos negativos
Tus pensamientos negativos siempre te orillarán a tomar la elección de no enfrentar tus miedos. Solo por hoy, haz el intento de ir en la dirección contraria a tus pensamientos. Es como cuando terminas cediendo a hacer ciertas actividades por obligación: sabes que no tienes más remedio que llevarlas a cabo. Haz lo mismo con la timidez: hazla a un lado aun contra tu voluntad y empieza a conversar e interactuar más con los demás.
Reconoce tus emociones
Cuando somos capaces de reconocer que algo falla en nosotros, en esa misma medida somos aptos para iniciar un cambio, ya que nos hacemos más propensos a darle la vuelta al problema. Esto es como filtrar esos pensamientos hasta depurarlos y encontrarnos listos para sobrellevarlos de una manera distinta.
La técnica de la máscara
Es una de las maneras más efectivas de hacer frente a una situación donde tienes que vencer a la timidez. Créate un alter ego, es decir, un personaje ficticio en quien te puedas reconocer o identificar y deja que él tome el control de la situación. Acude a esta estrategia cuando necesites armarte de valor instantáneamente. Conforme más la utilices te sorprenderá darte cuenta de que en menos de lo que esperas ese alter ego desaparecerá para que tu auténtico yo sea el que se dirija a los demás.
Dale seguimiento a tus contactos y amistades
Vencer la timidez y empezar a tener un círculo más amplio significa también darle seguimiento a estas nuevas amistades. A través de más conversaciones, llamadas telefónicas o las redes sociales alimenta esa relaciones hasta forjar lazos realmente duraderos. Solo de esa manera te vas a asegurar que tu carácter se acostumbre a socializar y sentirse cómodo.