Internacional. Una de las tendencias en los consumidores del 2014 -no sólo en México sino en el resto del mundo- es la constante exigencia de honestidad hacia las marcas. Y por tratarse de una época en la que los modelos de lenguaje tienden a cambiar para volverse más incluyentes, no es raro que de pronto surja en el mercado un producto que rompa con todos los esquemas de comunicación socialmente aceptables.
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Por tratarse de un libro de cocina, cualquiera podría esperar un lenguaje amigable y accesible entre sus páginas. Sin embargo, Thug Kitchen muestra como preparar los platillos más deliciosos por medio de órdenes bastante explícitas.
En su comercial, este recetario retoma el estilo de los clásicos infomerciales -aquellos en donde los protagonistas dan su testimonio a cuadro-, sin embargo el giro viene cuando las personas e incluso los pequeños textos de la parte inferior del video, presentan una buena dosis de simpáticas -y justificadas- vulgaridades, algunas más fuertes y graciosas que otras.
De esta forma, una mujer de edad avanzada comenta que le encanta cocinar pero “nadie tiene el pi%#e tiempo para salir a buscar una docena de ingredientes exóticos“. En un marcado tono irónico, este comercial se burla por completo del modelo de ventas convencional de algunos productos y a cambio muestra una refrescante muestra de irreverencia y lenguaje coloquial.
A continuación el video:
