Trabajar en equipo representa conciliar diferentes puntos de vista y alcanzar acuerdos para que los objetivos de las tareas se puedan cumplir a cabalidad.
Cuando no existen acuerdos, un trabajo bien planteado ni una adecuada repartición de las tareas, es muy probable que el conflicto surja en medio de la actividad y los desacuerdos afloren y pongan en peligro el buen término de la labor.
Para evitar problemas entre los integrantes de todo equipo creativo, lo mejor es saber identificar las posibles causas de los problemas y entender de dónde surgen las dificultades.
Pero tampoco se trata de satanizar las diferencias de opinión… del debate y contraposición de ideas surgen también los conceptos más acabados y todo proceso creativo se puede enriquecer.
En todo caso, lo que hay que hacer es conocer el origen del conflicto y sentar siempre las bases del diálogo. A continuación, enumeramos cinco causas que pueden originar desacuerdos y derivar en conflictos.
1.- Intereses antagónicos
Puede suceder que los integrantes del equipo están en búsqueda de objetivos contrapuestos, ante ello es necesario que la opinión del director creativo tenga un peso mayor que el de cualquiera de sus subalternos (por eso es director).
2.-No definir los roles de trabajo
Es necesario establecer cuáles son las responsabilidades de cada integrante del equipo para evitar malos entendidos durante la ejecución de los proyectos. Si cada quien sabe qué es lo que tiene que hacer será más sencillo identificar al responsable de posibles deficiencias y será más sencillo subsanarlas.
3.- Expectativas imposibles de alcanzar
En ocasiones los objetivos que se plantean resultan francamente imposibles de alcanzar. No es conveniente plantearse objetivos que no se pueden lograr porque pueden derivar en el desánimo del equipo de trabajo, una repartición de culpas errónea y el surgimiento de conflictos. Hay que ser realistas y establecer objetivos alcanzables.
4.- Mala comunicación en el equipo
Si los integrantes del equipo no establecen puentes de comunicación es posible que sus tareas no se lleven a buen término. Es necesario promover la comunicación ya sea a través del diálogo de frente y también por medio de las herramientas informáticas que estés disponibles: chats, correo electrónico, telefonía, aplicaciones móviles, etcétera.
5.- Integrantes problemáticos
La armonía del equipo depende de que cada uno de sus integrantes tenga una buena actitud y el deseo de trabajar en equipo. Francamente existen personas a las que les cuesta más trabajo realizar tareas en equipo, con ellos hay que trabajar un poco más y, si de plano no les resulta sencillo colaborar con los demás, lo mejor es retirarlos.
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