Ernesto Valverde, el entrenador del Barcelona, había pedido un mediocampista aguerrido, con buena dinámica y con llegada al gol. La dirigencia no defraudó: contrató a uno de los mejores con esas virtudes: el chileno Arturo Vidal.
Según trascendió, la transferencia fue por 20 millones de euros, un monto llamativamente bajo si se consideran otras transferencias de los últimos meses. El chileno tiene 31 años y ganaría 9 millones de euros netos por cada temporada de los tres por los que firmó el contrato.
Vidal se había mudado a Alemania en 2015 procedente de la Juventus de Italia por 37 millones de euros. Las versiones sobre el traspaso ya habían comenzado la semana pasada, cuando el chileno fue visto en Barcelona y, supuestamente, se entrevistó con gente del Barça para aprobar su examen médico.
El Barcelona ya gastó más de 130 millones de dólares esta intertemporada en acuerdos por el defensor francés Clément Lenglet y los brasileños Arthur y Malcom. También estuvo en negociaciones con el Paris Saint-Germain por Adrien Rabiot, pero la falta de voluntad de los campeones franceses de permitir que el jugador de 23 años abandonara el Parque de los Príncipes los llevó a centrar su atención en Vidal.
El Inter de Italia también se había fijado en Vidal, pero está enfocado en algo más ambicioso: fichar a Luka Modric, el croata subcampeón del mundo que juega en el Real Madrid.
❗ [ÚLTIMA HORA] Acuerdo con el Bayern de Múnich para el traspaso de @kingarturo23https://t.co/OboBJkznDD
— FC Barcelona (@FCBarcelona_es) 3 de agosto de 2018
El traspaso ya fue confirmado por ambos clubes. Tras la práctica matinal de este viernes del Bayern, el “Rey Arturo”, como lo apodan, compartió con sus compañeros y se despidió de ellos.
En la Copa América
Arturo Vidal no es un jugador catalogado como “ordenado”. En 2015, durante la disputa de la Copa América en Chile, que luego terminaría ganando, tuvo un accidente con su Ferrari. Tuvo lesiones menores y pudo seguir jugando.