Las máximas autoridades de salud de Chile iniciaron una investigación oficial para determinar el origen y las potenciales consecuencias de cuatro lotes de condones defectuosos que se entregaron de forma gratuita y que estuvieron a la venta.
Los problemas se detectaron en los productos distribuidos en las ciudades La Serena y de Coquimbo, a 400 km al norte de la capital, Santiago.
La mayoría de los condones habían sido entregados por el Gobierno en el marco de un programa de prevención.
La primera alerta fue encendida por la Fundación Chile Positivo, organización sin fines de lucro que informó sobre los condones defectuosos.
De acuerdo con la Fundación, inicialmente se trató de al menos 440 preservativos que fueron entregados en las playas de la zona en el marco de actividades de prevención, aunque luego se estimó que podrían ser muchos más los condones afectados.
La organización ahora quiere que el Gobierno chileno, además de investigar, se haga cargo de los problemas de salud potencialmente derivados del uso de los productos con defectos.
Cuál es el problema de los condones defectuosos
La investigación comenzó luego de una exigencia del Instituto de Salud Pública chileno (ISP).
Según la información oficial, la marca afectada es Suzhou Colour – Way New Material, en su variedad “Condón Masculino de Látex”.
El producto es importado y lo distribuye Cegamed Chile SA.
De acuerdo con los medios chilenos, los profilácticos presentan tres problemas:
- falta de lubricante,
- delgadez del látex
- y fácil ruptura.
Hay al menos cuatro lotes involucrados, los que se han retirado de los puntos de entrega y de la venta en los comercios.
Al mismo tiempo, las autoridades de Salud se contactaron con las instituciones de bien público que tienen esa marca de condón para distribuir de forma gratuita.
La idea es que se informen de la situación y sean cambiados por otra.
Los condones son noticia habitualmente por problemas relacionados con los defectos y la higiene.
En 2020, por caso, la BBC reveló que se había descubierto una fábrica que lavaba condones usados para revenderlos.
La fábrica estaba ubicada en Binh Duong, Vietnam, y tenía más de 320 mil condones usados que estaban siendo reciclados de forma ilegal, para poder revenderlos.
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