-
Según SmallBizGenius, siete de 10 expertos creen que el contenido aumenta la interacción
-
Las pequeñas empresas con blogs tienen más del doble del tráfico que aquellas sin uno
-
En los últimos años, las búsquedas por la palabra “mejor” crecieron en 90 por ciento
Hay varios retos que surgen en la ejecución de una estrategia de marketing de contenido. Sobresalir en un mar de compañías es siempre un reto complejo. Asimismo, la optimización de elementos como el SEO o los títulos para maximizar su impacto también es una preocupación constante. Incluso la relevancia de estos materiales para la audiencia debe ser una prioridad.
Notas relacionadas
- ¿Hacia dónde se dirige el Content Marketing?
- ¿Por qué usar el Content Marketing?
- Acciones de content marketing que las empresas ya deberían estar desarrollando en 2019
Pero también la cantidad que se produce debe estar en la mente de las compañías. Según Rubicly, es común que las empresas fracasen en su estrategia por la falta de contenido. Por su parte, Click First afirma que demasiado material puede abrumar a la audiencia. ¿Cómo se puede alcanzar un sano equilibrio? Marketing Profs propone cuatro estrategias específicas:
Definir el por qué de la estrategia de contenido
Un error frecuente entre varias empresas es que empiezan a abordar su proyecto desde qué les gustaría producir. Sin embargo, son realmente pocas las compañías que dan inicio a la iniciativa tomando en cuenta qué es lo que les gustaría lograr con ella. Si los negocios solo quieren un canal de video “porque está de moda”, sus oportunidades de éxito son casi nulas.
Lo anterior también permite a las empresas asegurar que cada nuevo contenido tenga un objetivo preciso tanto para su audiencia y su negocio. De esta forma, no solo se asegura que cada material sea relevante para el público. Asimismo, permite a las empresas no producir demasiado, o muy poco, de ningún tipo de recurso que pueda ser útil para sus operaciones.
Tener una visión clara de los materiales existentes
Cuando la compañía lanza su contenido, su ciclo de vida no termina después de unos días. Idealmente, si se tiene una buena optimización para web, estos materiales seguirán creando tráfico y visitas para la compañía. En ese sentido, es importante que las empresas estén bien conscientes de lo que ya tienen en sus librerías y cómo se relaciona con su información nueva.
Por ejemplo, no es poco común que las empresas generen dos o más artículos casi idénticos en el transcurso de años, incluso meses. Esto no solo es desperdicio de tiempo y contenido. También afecta a la misma empresa, si quiere tratar de posicionarse en los resultados web. Es mejor tener un catálogo de textos y recursos que ya se han hecho y revisarlo constantemente.
Reutilizar lo que se tiene en vez de crear nuevo contenido
Estar consciente de lo que ya hay en plataforma no solo evita que se dupliquen artículos. Es también útil porque permite darle nueva vida al contenido que ya existe. Si las empresas ya han hecho un texto sobre un tema del que ya han hablado, pero creen que es necesaria una actualización, no hay que hacer algo nuevo. Es mucho más eficiente modificar el original.
Cabe destacar que estas técnicas no solo son útiles para cuando se quiere actualizar o añadir información de un tema que ya es viejo. También es útil para crear contenido nuevo basado en piezas existentes. Ejemplo: una publicación de blog puede transformarse en una infografía, sin cambiar los datos. Lo mismo puede hacerse con una cápsula de podcast y hacerla un video.
Diseñar un flujo de trabajo estricto
La mejor forma de asegurar si un contenido nuevo vale la pena o no, es a través de una toma de decisión estandarizada y formal. De esta forma, cada nuevo tema o caso se puede pasar por este sistema y obtener una respuesta clara y adecuada la gran mayoría de las veces. Por supuesto, la mejor forma de crear este proceso es a través de un diagrama de flujo de trabajo.
Cada compañía debe establecer un proceso de evaluación para cada nuevo contenido. Si se quiere crear un material hay que preguntarse, por ejemplo, ¿es relevante a los usuarios? Si no, hasta ahí llega el proceso. Pero si la respuesta es afirmativa, hay que ver si hay recursos que también lo toquen en la librería. De esta forma se puede crear una toma de decisión infalible.