Aparentemente no hay publicidad ni patrocinios de tabaco en los deportes. Eso, en apariencia, porque en la Fórmula 1 sí los hay de forma velada y colateral. En la F1 desde 2006 por mandato de la Organización Mundial de la Salud (OMS) a la Federación Internacional de Automovilismo (FIA) está prohibida la publicidad y los patrocinios de tabaco o cualquier producto relacionado directamente o indirectamente con este giro. Y la F1 es un deporte ideal para el tabaco, por el glamour, la tecnología y la visión mundial. Por ello, las marcas de tabaco no se resignar a irse de la categoría reina del automovilismo. Tal parece que es un deporte de machos. Vienen a mi mente las imágenes setenteras de un campeón mundial como James Hunt, rodeado de mujeres guapas, glamorosas y fumando sentado en su F1.
En 2019 pasó algo un poco raro. Se empezó a hablar como un rumor que habría un gran premio de Sudáfrica ¿Por qué? Pues porque da la casualidad que la publicidad de tabaco no está prohibida en ese país. Se dice que las marcas de tabaco están impulsando el gran premio y los grandes premios africanos para lograr generar campañas publicitarias de sus productos. Y es que el tabaco tiene una gran historia en las carreras. John Player Special con un diseño muy tradicional para Senna en un Lotus legendario y Camel también logró ser un diseño clásico con el campeón del mundo. Poe supuesto muchos recordamos a Marlboro con la escudería McLaren. Las marcas de tabaco encierra forma son la esencia de la fórmula 1 mundial.
Marlboro de la escudería McLaren se va a Ferrari en 1984 y aquí pasa algo muy interesante para la publicidad hasta cierto punto engañosa en el mundo de los deportes y el tabaco. En 2010, pusieron el logotipo de Marlboro muy raro que estaba como una especie de huella de agua, que simulaba ser el de Marlboro pero no lo era directamente, algo así como una especie de logotipo simulado subliminal. Phillip Morris, el corporativo dueño de la marca Marlboro está muy metido en la escudería Ferrari. Los principales directivos de Philip Morris han trabajado en Ferrari y viceversa. Cada año, el corporativo de tabaco le paga 160 millones de dólares por concepto de patrocinio. Por aparecer o no aparecer de forma directa en las carreras de la F1 mundial. Desde 1984 a la fecha Philip Morris ha gastado cerca de 600 millones de dólares en patrocinios a la escudería Ferrari. En esta temporada, los cigarros, se publican indirectamente a travez del ente Mission Winnow en Ferrari que no es nada. Es una especie de foro de discusión de fumadores pero no existe en realidad. Es una campaña de relaciones públicas de la tabacalera. En esta temporada, les han pedido que quiten este logo una vez más ¿Legal o no? ¿Etico o no? Las marcas de tabaco están desesperadas por hacer publicidad y se las están ingeniando como sea. Están pasando a ser más astutas pero también menos éticas y más ilegales.