El inusitado crecimiento y popularidad de Instagram, la están convirtiendo en una de las redes sociales más utilizadas. Ya rebasa los 700 millones de usuarios en todo el mundo y su simplicidad y carácter gráfico la están convirtiendo en una de las que más crece en el mundo.

Entre las claves del éxito de esta plataforma, está su capacidad de ganar seguidores rápidamente. Su facilidad de uso la convierte en la aliada perfecta de aquellos que quieren contarlo todo en todo momento y ello incluye a las marcas.

De acuerdo con un estudio realizado por la IAB, 49 por ciento de los usuarios de redes sociales tiene esta aplicación y 8 de cada 10 usuarios declara seguir a alguna marca. Mientras que Forrester Research, destaca en otro estudio que Instagram es la mejor plataforma para las marcas que quieren interactuar con los usuarios, pues los seguidores de una marca en Instagram están 58 veces más comprometidos que los de Facebook y 120 veces más que los de Twitter. 

Y, ¿cómo podemos optimizar nuestra presencia en Instagram?

Las descripciones de las fotos en Instagram se basan en hashtags, por lo que la primera regla es utilizarlos con prudencia. Hay que tener criterio, ser inteligentes y mesurados en su utilización y no hacerlo de forma indiscriminada. Los hashtags deben de tener intencionalidad, aportar valor y estar siempre asociados a la foto o el tema. Hay que tratar que estos sean los mas populares, pero eso no significa recurrir a hashtags que no estén ligados al tema o a la marca, simplemente porque son los más divulgados.

Hay que tratar de humanizar la marca. No se trata de colocar solo product shots o fotos rebuscadas, sino de contar historias, inclinarse por las situaciones, las experiencias, las personas y la utilidad del mensaje. Eso sí, las fotos siempre deben de ser de primera, pues ellas están directamente asociadas con la marca. Prohibido utilizar material de baja calidad.

Se tiene que ser constante, pero mesurado. No debemos de permitir que se pierda de vista el mensaje o la marca, pero tampoco tenemos que ser invasivos o reiterativos. Debemos siempre pensar en los usuarios que no solo están siguiendo a mi marca, si no que tienen muchos otros intereses. Privilegia la calidad, contra la cantidad.

Interactuar es determinante. No hay que ser egoístas, dar likes a otros usuarios y seguidores y comentar también sus posts. Esta reciprocidad ofrece uno de los valores más importantes de Instagram, pues los comentarios tienen nombre, son espontáneos y muy valiosos para determinar el curso de una marca en redes sociales.

Los comentarios le han dado la posibilidad a Instagram de convertirse en un auténtico chat. Recientemente un programa de televisión matutino, anunció a través de Instagram la incorporación de una nueva comentarista. El rechazo fue tan rotundo, que tuvo que desistirse de hacerlo.

Encuentra cuáles son las mejores días y horas para tu publicación; como en el tráfico, cada red social tiene sus horas pico y sus fechas de congestionamiento o baja presencia de usuarios. 

Los contenidos y la edición, son los ejes del éxito. Por ello es recomendable utilizar diferentes formatos como collages, series de fotografía, videos o Instagram Stories, que son sumamente divertidos y dan campo abierto a la creatividad.

Una de las grandes revoluciones que han ido gestando plataformas como Instagram, obedece a la oportunidad que le ha dado tanto a las empresas como a las marcas de crear un potencial mercado susceptible de consumir sus productos sin necesidad del SEO de Google, afirma el bloggero Alvaro Narváez y agrega: Antes de esta revolución, la mejor forma de realizar marketing digital era a través de Google y su enigmático y cambiante algoritmo. Ahora tenemos a nuestro alcance el poder de lo viral y lo social, en lo cual Instagram está muy bien posicionado”.

En realidad, la base de su éxito es que incorpora la innovación en cada uno de sus servicios, que se reinventa y mejora constantemente. No hay que olvidar que esta red social empezó como un servicio basado solo en imágenes y hoy en día ofrece diferentes formatos de contenido, quitándole lo aburrido y haciéndolo divertido.