Cerramos un año y debemos dejar huella positiva, también es importante prepararnos para iniciar una grandiosa etapa.

Te comparto 3 puntos clave para prepararte e iniciar un gran año:

1.-Reflexiona en tu desempeño

Evalúa tu rol como jefe, colaborador, socio, dueño, hijo o padre de familia, ¿cómo es tu desempeño?, estás satisfecho, reflexiona en tus áreas de oportunidad, a veces nos acostumbramos a un dolor y lo tomamos como normal en nuestro día a día.

Nos acostumbramos a pedir las cosas varias ocasiones y normalizamos los reprocesos, ¿te ha sucedido?, un requerimiento se convierte en una cadena de correos donde se pierde el detalle entre uno de tantos mails, que laborioso estar leyendo varios correos en lugar de enviar un solo mail, ¡cuánto tiempo perdido!

En las empresas se trabaja con diferente metodología, cierto pero el cliente no percibe excusas, percibe resultados, como le llegó el reporte, se solucionó el problema o tuvo que insistir varias ocasiones, se atendieron los puntos vistos en la junta o fue tiempo perdido.

Reflexiona en tu desempeño, no normalicemos áreas de oportunidad como parte de nuestro día a día, al finalizar el día evalúas y lo que más te absorbe tiempo son los detalles, eso no es productivo, seamos personas de calidad para que nuestro trabajo sea de calidad.

2.-Fíjate metas

Nuestra labor impacta a clientes y compañeros de trabajo, por eso nuestras áreas o departamentos deben trabajar con metas medibles y alcanzables, monitorear indicadores, es la manera en que se refleja nuestro trabajo.

¿Qué vas a hacer para alcanzar tus metas?, contagia de entusiasmo a tu equipo, empodéralo, no lo hagas dependiente al 100% de tus decisiones, el siguiente año será un gran reto, habrá que mejorar los resultados.

En muy poco tiempo, los millenials, dominarán el mercado laboral, en la medida en que un trabajador sepa que puede crecer en la empresa en la que está, más cerca está de sentirse satisfecho laboralmente, de acuerdo al “Estudio Tendencias del Entorno Laboral México 2018” de Kelly Services.

3.-Haz tu Plan estratégico personal

Claro, es momento de tener iniciativa, no dejes que las circunstancias inesperadas interrumpan tus planes, siempre debes tener un “Plan B”, planea, actúa, evalúa y mejora como filosofía de vida.
Una empresa saludable, también fomenta el equilibrio de vida de sus colaboradores con su vida profesional y personal. Un colaborador saludable, rinde mejor, es productivo y es un gran embajador de nuestra marca empleador.

Recuerdas cuando eras más joven y tenías grandes ilusiones, sueños, ¿cómo va tu vida? , quizás la época navideña te contagia de sensibilidad y espero deje una “sacudida en tu vida”, para establecer fechas compromiso contigo mismo, aprende algo nuevo, ejercita tu mente, fortalece tu vida espiritual. No se trata de ir a trabajo y cumplir una rutina, casa, tráfico, trabajo, no se trata de “sacarle verdadero juego a la vida”, tus conocimientos pueden ser obsoletos en poco tiempo, también tu cuerpo sí no lo ejercitas.

Fortalece tu vida espiritual, ¿cómo te preparas para recibir la navidad?, esto debería renovar tu vida, por su gran significado.

Fuente:

Mi experiencia profesional en consultoría de negocios.

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