Mientras permanece detenido en Japón y estÔ siendo investigado por presunta evasión impositiva y mala conducta financiera, el alguna vez todopoderoso Carlos Ghosn sigue recibiendo malas noticias.
Este lunes, luego de una reunión de la junta directiva, Mitsubishi Motors lo destituyó como presidente de la compaƱĆa, cargo que ocupaba desde 2016, cuando la marca japonesa pasó a ser parte de la mega alianza con Nissan y Renault.
El CEO Osamu Masuko se convertirÔ en el presidente temporal hasta que se designe uno nuevo, dijo el fabricante de automóviles nipón en un comunicado.
Ghosn fue el mĆ”ximo artĆfice de la alianza de Nissan con Renault hace 19 aƱos. Fue allĆ” por 1999, cuando la marca japonesa fue rescatada de la bancarrota gracias a un acuerdo con la francesa que le permitió a los miembros desarrollar productos en conjunto y controlar sus costos.
La alianza compite hoy de forma directa (y muy pareja) con Volkswagen y Toyota por ser el mÔs grande fabricante de automóviles del mundo. En 2017, hubo un virtual empate entre los tres poderosos: VW, Toyota y la alianza Renault-Nissan-Mitsubischi lideraron el mercado con algo mÔs de 10 millones de unidades vendidas cada grupo.
Aunque Nissan se recuperó de su crisis de fin del siglo 20 y creció rĆ”pidamente, sigue siendo un socio menor en la estructura accionaria. Renault posee el 43 por ciento de Nissan y el fabricante de automóviles japonĆ©s tiene una participación sin voto del 15 por ciento en la compaƱĆa francesa. Eso, en un contexto general donde Nissan es casi un 60 por ciento mĆ”s grande que Renault si se tienen en cuenta sus ventas.
¿Qué pasarÔ ahora?
Los principales ejecutivos de la alianza se reunirĆ”n esta semana en Ćmsterdam, Holanda, con el objetivo de decidir los pasos a seguir y tratar de encapsular el escĆ”ndalo sólo a la figura de Ghosn.
El problema es que, por ahora, Renault no quiere despedirlo como presidente y ni como su director general.
En Nissan hay desconfianza. Es que Ghosn era quien mĆ”s presionaba para que el vĆnculo entre las dos empresas fuera mĆ”s profundo. De hecho, buscaba una fusión total entre Renault y Nissan, con el apoyo del gobierno francĆ©s de Emmanuel Macron.
Nissan echó a Ghosn el jueves de la semana pasada, tras una reunión de la junta directiva. Fue luego de que se conocieran detalles de las acusaciones que pesan sobre Ghosn de subestimar sus ingresos y de usar el dinero de la empresa para uso personal.
Lo Ćŗnico que se sabe de lo que dijo Ghosn sobre el tema es que el brasileƱo ācriado en El LĆbano y luego en Franciaā negó las acusaciones, segĆŗn informó este domingo la emisora āāpĆŗblica japonesa NHK.
Luego del despido de Ghosn, las acciones de Mitsubishi Motors tuvieron un alza del 3,3 por ciento, mientras que Nissan subió el 1,8 por ciento, luego de fuertes caĆdas de ambas la semana pasada.
Defensa
Siempre segĆŗn el medio nipón NHK, información luego reproducida por el WSJ, Ghosn estĆ” siendo representado por el ex fiscal japonĆ©s Motonari Otsuru. AdemĆ”s, tambiĆ©n contrató a la firma de abogados con sede en los Estados Unidos “Paul, Weiss, Rifkind, Wharton & Garrison”.
Brad Karp, el presidente de la firma y abogado defensor de los principales bancos de Wall Street, representarĆ” al Ghosn junto con otro socio de la firma, Michael E. Gertzman.