“Todos caminaron. Pero pocos dejaron huellas” José Narosky
El pasado 2 de mayo de 2021 falleció una persona que trascendió al dejar grandes enseñanzas, ejemplos y logros para los organismos de la sociedad civil organizada
“La misión más importante de cualquier persona es formar gente y esa fue una tarea que un buen director entiende y practica con excelencia y gran humanismo”
Ésta es una historia que estamos motivados a compartir ya que a partir de ellas se logran generar modelos de éxito, de liderazgo con integridad, sentido humano, y una voz con autoridad moral, de esas que demandan los organismos de la sociedad civil (OSC) en un contexto de actual descalificación por un gobierno obtuso.
“Los organismos de la sociedad civil, un fenómeno en sí mismo que se nutre del eterno deseo de la gente de conectarse y participar en los grandes problemas y oportunidades del país”
Principios del trabajo en sociedad
Hay principios del trabajo en sociedad que se instauran con la profesional, activa y apasionada trayectoria de un líder cuya entrega e involucramiento dejen huella después de años de intenso trabajo de construcción de un organismo intermedio de carácter profesional, de manera conjunta con los fundadores y primeros asociados del Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas, todos ellos directivos financieros de las principales empresas en México.
Parafraseando a Peter Druker, “Los organismos de la sociedad civil no lucrativa, se encuentra muy por delante de las empresas en sus modelos de gestión para enfrentar el futuro”.
Ser colaborador, en cualquier nivel, en un organismo de la sociedad civil es una profesión, y ésta se debe impulsar y fortalecer. En USA hay una gran cultura de estos OSC, representan todo tipo de actividades humanas que van “desde la cuna hasta la tumba”, estos organismos se integran en el “Centro de Liderazgo de Asociaciones” ASAE organización esencial para la gestión de asociaciones, representa tanto a organizaciones como a profesionales de asociaciones individuales.
Lograr representatividad con integridad, fuerza técnica y moral esa es una máxima aspiración a la que debe aspirar cualquier OSC en beneficio de sus miembros y de la sociedad en general. Los OSC organizada son la máxima expresión de responsabilidad ciudadana”
Un director general, entiende, atiende y comparte con sus colaboradores la importancia de la responsabilidad del papel o rol de los organismos intermedios y la tarea que toca al personal de tiempo completo, si se logra introspectar en cada colaborador en primera instancia de la vida del OSC, se genera una mística la cual se refleja al anteponer a las personas y dar un servicio profesional de excelencia.
“Cuando quieras construir algo que perdure, procura que los cimientos sean sólidos”
Tareas de un director general de un organismo en la sociedad civil organizada.
- Dar continuidad a la filosofía (misión, visión, valores) objetivos y programas de la organización y manifestar la necesidad de cambios cuando sean necesarios
- Guardar y hacer guardar los estatutos de la agrupación.
- Salvaguardar el patrimonio de la institución.
- Vigilar que los asociados reciban los beneficios ofrecidos por el pago de su membresía
- Integrar las mejores prácticas referidas a OSC.
- Formar un equipo con integridad y de alto desempeño.
- Dar apoyo técnico, administrativo, asesoría, mentoría o coaching a los asociados que se integran a un comité, consejo directivo o en los diversos mecanismos de participación de la asociación, en una palabra, ser un “facilitador”.
- Coordinar al personal de tiempo completo a darle operatividad, funcionalidad a los programas, proyectos y eventos de la asociación.
Fomentar a través de canales ágiles la comunicación para que las empresas y personas estén informadas, participen y se beneficien del intercambio de conocimientos y experiencias con otras empresas o personas
El reto del trabajo colaborativo entre asociados y personal de tiempo completo
El éxito de un OSC se fundamenta en el trabajo colaborativo, se trata de trabajo matricial el cual se basa en dos aspectos: funciones y proyectos en los que participan voluntarios y personal de tiempo completo. Para tal tarea, que generalmente tiene exigencias de tiempo y espacio, debe mantenerse una comunicación honesta entre los participantes externos e internos en una sana relación psicológica, con la actitud para actuar en la misma frecuencia en una interacción abierta basada en confianza sinceridad y respeto mutuo.
“Y Honor a quien honor merece”. Descansa en Paz querido amigo Rubén Carranza Rubio, director general IMEF (1964-1978) concluyo con la frase inicial de esta colaboración “Todos caminaron. Pero pocos dejaron huellas” José Narosky.