Por León Felipe Sánchez Ambía
Correo electrónico: [email protected]
Twitter: lion05
Hoy en día hay dos formas de adquirir un teléfono celular en México: mediante un plan tarifario o mediante un plan de prepago. Mi experiencia con la telefonía celular ha pasado por las dos principales compañías en México. La cuasi monopólica Telcel y la muy rezagada Iusacell.
Es muy desconcertante y frustrante comprar un teléfono celular para darte cuenta que, si eres un usuario con un poco de conocimiento por encima del promedio, dichos aparatos están bloqueados para funcionar únicamente con el proveedor de servicios con quien lo adquiriste. A esta práctica se le conoce como SIM-Lock en el caso de los teléfonos GSM (tecnología utilizada por Telcel).
Si eres una persona que viaja constantemente al extranjero, la situación resulta aún más grave debido a que tendrás que pagar tarifas exhorbitantes (sin exagerar) por el uso de tu teléfono fuera de México. Si además eres una persona que utiliza servicios de datos… agárrate!!
De acuerdo con la página de Telcel el Sim-Lock es un “Bloqueo que los operadores ponen a los teléfonos vendidos para que sólo funcionen con tarjetas de su compañía. Este bloqueo consigue abaratar el coste del teléfono hacia el consumidor ya que parte de su precio es financiado por el operador.”
Atendiendo a esta definición, la primera pregunta que cabe hacernos es: si se recurre a esta técnica para abaratar los costos de los teléfonos, ¿porqué salen tan caros? La segunda pregunta que me surge es, si completo mi plazo forzoso y pagué ya el teléfono, entre la cuota inicial y las rentas del plazo forzoso, ¿porqué no le quitan la restricción para que pueda usarlo con cualquier compañía?
Las respuestas son sencillas. La primera es porque pueden y la segunda es porque quieren. Sin embargo, aunque no está especificado en el contrato (y sí en su formato de atención) se puede ejercer una acción legal al finalizar el contrato para obligar, en este caso a Telcel, a liberar el teléfono y poder utilizarlo con un SIM de cualquier compañía celular en el mundo.
La acción la debes ejercer por la vía civil y demandar la liberación del teléfono a fin de poder gozar plenamente del derecho de propiedad que te corresponde como dueño del aparato celular. Lo anterior se fundamenta en que, como dueño del teléfono, debes de poder hacer libre uso del mismo y sujetarlo a una sola compañía interfiere con tu libertad de disponer y decidir, irrestrictamente, sobre tu teléfono.
Sobra decir que si intentas arreglarlo por las buenas, será imposible. Como ejemplo, el iPhone puede ser liberado por las compañías pertenecientes a América Móvil en varios países de latinoamérica, sin embargo, específicamente en México, no dan la opción.
Al final es un tema de legalidad, no de voluntad. La ley nos concede derechos y está en nosotros ejercerlos o dejar que sigan abusando de nosotros como consumidores.
Son las Leyes de Mercado. Asesórese con su abogado.