Por hora se suben a las redes sociales miles de videos. Sin embargo ¿Qué hace que uno de ellos sea compartido por millones de personas alrededor del mundo? Te traemos algunas claves que muestran cómo un clip tan corto se puede hacer popular.
Que hablen, bien o mal pero que hablen: La idea de hacer un video viral es generar ruido en redes sociales. Pero muchas marcas han entendido que ese flujo de comentarios puede ser de cualquier tipo, solo deben encender la chispa que ataque la sensibilidad de quien lo ve.
¡A compartir!: Aunque un video puede ser emocionalmente interesante no lo convierte inmediatamente en viral. Se deben activar ciertos drivers en la mente de la persona para que se sienta motivado compartirlo. Podemos encontrar situaciones como la imitación (el Ice Bucket Challenge por ejemplo). Además, de los populares consejos o historias llamativas.
Autenticidad ante todo: No importa lo que quieras convertir en viral, mientras más auténtico se vea mejor.
Cuidado con lo que quieres comunicar: El mayor de los problemas que enfrenta un video viral es que nadie recuerde lo que quieres comunicar. Si buscas dar a conocer tu marca y el video se hace popular pero nadie recuerda quién lo publica, lo estás haciendo mal.
Ahora, busquemos en el baúl de los recuerdos algunos de esos videos que se convirtieron en virales.
Comencemos por el hombre semidesnudo que daba consejos a las mujeres para que compraran desodorante para sus parejas. Publicado hace ya más de 5 años por Old Spice, cuenta con más de 50 millones de visitas.
A veces la belleza depende de los ojos de quien mire. Así lo podemos ver en este spot de Dove, que con 65 millones de visitas y traducido a más de 25 idiomas muestra que a veces somos muy duros con nuestra apariencia.
Por otro lado, cómo olvidar a ese bombero anónimo que salvó a un hermoso gato gris. Esto lo pudimos ver gracias a GoPro. El registro en video de este evento con una cámara de la marca atrajo alrededor de 1.5 millones de reproducciones en Youtube solo en la primera semana.