El marketing moderno es un lidiar a diario con sus problemas, y por extraño que resulte, hubo alguna vez donde la mercadotecnia fue simple; en aquellos tiempos se podían elaborar de forma detallada un plan anual y luego ejecutarlo con poco o ningún ajuste. Las campañas fueron grandes y salían con poca frecuencia, y los cambios eran muy raro que sucedieran.
De acuerdo con el portal de Jeff Bullas, esos días con planes estables han desaparecido por completo, por lo que este segmento ha evolucionado, en un mundo volátil, digital e hiperconectado, muchas cosas pueden cambiar en 90 días y los equipos de marketing deberían responder a la misma velocidad.
Es por ello que los métodos ágiles pueden ofrecer a este nivel, pero no se ejecuta únicamente acelerando el proceso actual. Se tiene que cambiar a un marketing realmente veloz.
La mayoría de las personas estamos acostumbrados a trabajar en lo que se conoce como el método de la cascada, en el que cada parte del proyecto avanza, uno detrás de otro, de manera ordenada y lineal. No se pueden saltar pasos en el proceso ni hacer nada simultáneamente; todo depende de los pasos anteriores.
Esto significa que la producción de mercadotecnia es que durante mucho tiempo no se lanza nada, y de repente, aparece un gran lanzamiento de campaña, algo que resulta arriesgado ya que es probable que los competidores cada vez más ágiles obtengan algo muy similar antes de hacerlo. Entonces, la campaña se vuelve irrelevante.
De igual forma, refiere el sitio de Bullas, la falta de habilidades psíquicas significa que tu campaña costosa, planeada a detalle y coreografiada de manera perfecta podría ser un fracaso total. La fuente precisó que las investigaciones recientes indican que entre el 20 y 30 por ciento de los equipos de marketing están practicando con cierto nivel de agilidad, y esos números están subiendo todo el tiempo; es por ello que correr a un ritmo trimestral, te perjudicará en el pronto tiempo.
Incluso las principales marcas pueden cometer estos grandes errores, ejemplo de ello es Dove o Pepsi. Los pequeños lanzamientos y frecuentes son claramente el proceso a seguir; sin embargo, crear las condiciones adecuadas para este enfoque requiere de cambios en todo el proceso y modo de pensar.
El primer paso, y posiblemente el más crítico, detalló el portal de Jeff Bullas es el proceso de comercialización ágil, en el cual se debe decidir qué marco se usará para guiar a tu equipo. Los tres más comunes son:
Scrum: El enfoque más conocido y más estructurado. Scrum se basa en Sprints timeboxed que duran de una a cuatro semanas.
Kanban: Un modelo de mejora continua más que un sistema de gestión de trabajo, este mecanismo está diseñado para adaptarse a cualquier proceso que usas ahora y hacerlo funciona mejor.
Scrumban: Se trata de un híbrido de los dos anteriores, lo que permite a todos los equipos ágiles seleccionar y elegir entre ambos enfoques para crear un sistema personalizado propio.
A continuación te diremos cuándo implementar cada estrategia.
Cuándo usar Scrum:
Este mecanismo fue diseñado para funcionar mejor en equipos pequeños (5-8 aproximadamente) que son altamente multifuncionales, tienen todas las habilidades necesarias para completar tu trabajo. Esto ayuda a los equipos a liberar la labor con mayor frecuencia al tiempo de fomentar la interacción al permitir que los equipos vuelvan regularmente.
Se debe tomar en cuenta que Scrum exige mucho a los equipos para que trabajen de maneras particulares. Incluye reacciones así como roles que son necesarios para que la metodología funcione. Si el cambio es difícil en tu organización, esta puede no ser la opción correcta.
Cuándo usar Kanban:
Al igual que en el caso anterior, Kanban es más adaptable que Scrum, resulta una gran opción para los equipos cuyos tamaños quedan fuera de la gama de Scrum, lo que significa equipos menores de cinco o más de ocho.
De igual forma, también resulta una buena opción para aquellos equipos que dependen de contribuyentes externos, como agencias, autónomos o demás departamentos. En caso de que se espere a que alguien más contribuya antes de que se pueda completar un proyecto, puede ser complicado de seguir.
Bullas señala que se debe considerar Kanban si sus especialistas en mercadotecnia ya están estresados y no podrían manejar una gran agitación.
Cuándo usar Scrumban:
En caso de estar intrigado por el modelo anterior, pero no puedes imaginar abandonar el timeboxing por completo, es entonces que Scrumban es para ti. Este mecanismo ofrece la entrega predecible y frecuente de Scrum sin algunos de los gastos generales administrativos que pueden atascar equipos de Scrum.
De igual forma, la flexibilidad de este enfoque también puede generar que sea una buena opción para aquellos equipos cuyo proceso ya parece funcionar bastante bien.
Es hora de adoptar campañas viables mínimas, capacitar a sus equipos para experimentar y hacer que tus procesos de comercialización sean realmente ágiles. Si no se hace, es posible que te encuentres muy por detrás de tu competencia ágil que puede comunicarse con los clientes 6 veces más seguido.