¿Hay éxito sin fracaso? En la mayoría de las veces, no. Toda idea brillante tuvo tropiezos detrás, a menos que haya tenido un extraordinario golpe de suerte. Los empresarios y emprendedores que están detrás de las grandes empresas y marcas a nivel mundial son personas que tuvieron que sortear infinidad de obstáculos y fracasos antes de llegar a lo más alto. Su experiencia la ponen al servicio de quienes busquen un poco de inspiración y aprender que el fracaso no tiene por qué ser necesariamente algo malo.
Elon Musk y su visión del fracaso
“El fracaso es una opción aquí. Si las cosas no fallan, eso significa que no estás innovando lo suficiente”, dijo Elon Musk a los empleados de SpaceX pocos días después de que la empresa fuera creada. Con ello, el excéntrico multimillonario les daba su voto de confianza a sus colaboradores para atreverse a buscar vías diferentes para conseguir otra clase de resultados.
A menudo, el éxito viene precedido de múltiples caídas antes de encontrar esa idea brillante que le cambia el rostro al mundo. “Algo que puede ser útil es el fatalismo, hasta cierto punto”, explica Musk. “Si únicamente aceptas las probabilidades, entonces eso disminuye el miedo. Al crear SpaceX, pensé que las probabilidades de éxito eran de menos del 10% y acepté que probablemente lo perdería todo. Pero que tal vez haríamos algún progreso”.
Richard Branson y el fracaso como maestro
“No te avergüenzes de tus fracasos, aprende de ellos y comienza de nuevo”. La visión de Richard Branson, dueño y CEO de Virigin, es muy clara. Para él no haya de malo en caer, sino en no intentarlo, que es la base del fracaso. Ir por tus sueños, intentar llevar a cabo lo que amas y cumplir tus metas es un arma muy poderosa que distingue a los ganadores de los que siempre ponen excusas para evitar el confrontamiento con sus objetivos.
Adopta la filosofía de Richard Branson y aventúrate a hacer cosas distintas para conseguir lo que buscas: el éxito. Y si fracasas, solo tómalo como la enseñanza que necesitabas para triunfar. “No aprendes a andar siguiendo las reglas. Aprendes haciendo y cayéndote”, dice el millonario dueño de Virgin.
Sarah Blakely y una tierna historia sobre el fracaso
Gran parte de la manera en que cada persona concibe el éxito o el fracaso viene desde la forma en que nos educaron en el hogar. Sarah Blakely, dueña de la marca de ropa interior Spanx, así nos lo ilustra: ”Mi padre me animaba a que en cualquier momento en el que algo no saliera como esperaba, o en el que tal vez me avergonzara por una situación, escribiera dónde estaban los regalos ocultos y qué conseguía de ello”, dice Blakely. “Empecé a darme cuenta de que siempre habría alguna cosa positiva que no quería dejar pasar”.
Bill Gates y las enseñanzas de las caídas
“No hay nada de malo en celebrar el éxito, pero hay que tener en cuenta las enseñanzas que nos da el fracaso”. Para Bill Gates, uno de los multimillonarios más influyentes del mundo, el fracaso no representa ningún problema, siempre y cuando se convierta en un maestro que nos haga mejores emprendedores y personas.
Y remata con esta frase donde hace hincapié en que el éxito tiene que tener un poco de derrotas al lado: “El éxito es un pésimo maestro que seduce a la gente a pensar que no puede perder”.
Mark Zuckerberg y los riesgos que hay que asumir
El CEO de Facebook, una de las redes sociales más importantes en la historia del internet, tiene muy claro que para tener éxito se tiene que arriesgar más de lo que creerías que puedes hacer: “No asumir ningún riesgo es el mayor riesgo. En la actualidad, el mundo cambia muy rápido, así que no asumir riesgos es una estrategia que garantiza el fracaso”.
Los negocios son como la vida misma: quien permanece durante mucho tiempo haciendo lo mismo, está condenado a repetirse a sí mismo y quedarse ensacado en una zona de confort. “Los éxitos más importantes se consiguen cuando existe la posibilidad de fracasar”, finaliza.
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