Buenos Aires, Argentina.- No sólo las marcas lanzan objetos de promoción y merchandising. Los gobiernos también pueden tener su propia colección de productos especialmente diseñados. Este es el caso de un sitio de Internet que vende tazas, camisetas y cajas decoradas con la imagen de la presidenta argentina, Cristina Fernández; del ex mandatario, Néstor Kirchner; y de algunos de los íconos del gobierno actual.
La era kirchnerista en la Argentina ha abierto el debate sobre muchos de los paradigmas que se creían inamovibles en el país. Con sus claroscuros, la política volvió a tomar impulso y ha dado espacio para emprendimientos imposibles en otros años: sí, nace el merchandising estatal.
A través de sitio de Internet Barro Nuestro, Marcos Fontela y Clara Biedma unieron fuerzas para hacer promoción del merchandising del kirchnerismo, que, por estos días, genera una verdadera pasión militante. “Quisimos comenzar a realizar productos que lleven un mensaje en el que creemos”, explicó Fontela en una entrevista publicada en Infobae. “Mi socia es kirchnerista, yo soy peronista de toda la vida y creo que el proyecto que mejor encarna los ideales de Perón es el kirchnerismo”, agregó.
Barro Nuestro comercializa tazas, cuadernos, cajas, remeras, calendarios y hasta los históricos pingüinos que se utilizaban para servir vino. Todos los objetos, con caras de Evita, Juan Domingo Perón, Néstor Kirchner y Cristina Fernández. Los precios se ubican desde los 15 dólares, en adelante.
También forman parte del novedoso merchandising palabras, leyes, frases o acciones que son parte de la historia reciente de la Argentina, como “CrisPasión“, la “Ley de Medios“, “YPF” y “Nestornauta“. Entre los productos más vendidos se encuentra la taza del “abrazo histórico”: de un lado está el de Néstor y Cristina; del otro el de Perón y Evita.
El merchandising no oficial en apoyo al gobierno le ha generado algunos dolores de cabeza al creador de la página. “Tengo una carpeta con los mails de todos los insultos que nos han llegado. Incluso a esa gente le respondemos amablemente y con alegría, porque creemos que este es un proyecto en el que no se está destruyendo sino construyendo”, dijo Fontela.
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