En la vida cotidiana los colores nos impactan día a día en nuestra vida cotidiana. Pero como consumidores… ¿cómo influyen los colores? Más de lo que podemos pensar.
Los colores son creados en nuestro cerebro como una herramienta perceptual para facilitar nuestras funciones visual-cognitiva y visual-afectiva, es así que los colores son más que un proceso físico: son utilizados como fuente de información que nos ayuda a decodificar el mundo que nos rodea, es por esto de la importancia de su uso en la mercadotecnia.
Todas las marcas están actualmente ligadas a un rango de colores que representa parte de su imagen, de su historia y de lo que quieren representar para los consumidores. No es casualidad que después de un largo proceso de posicionamiento por parte las empresas, los consumidores los relacionen con un color definido, ya que forman parte de su personalidad y de su impacto en su segmento meta.
Los colores en Marketing y Publicidad tienen la enorme capacidad de comunicación, transmiten y expresan sensaciones, sentimientos y estados de ánimo, con ellos se pretende llamar la atención del público.
Algunos de los colores básicos y su impacto son:
Azul. Es sinónimo de seguridad y responsabilidad. Transmite confianza, seguridad y madurez
Rojo. Representa energía, fuerza y pasión. En marketing se usa para llamar la atención y estimular la mente en los consumidores
Amarillo. Implica entusiasmo y juventud; se relaciona con el sol y con la luz. En una empresa puede representar creatividad, energía y juventud
Verde. Está relacionado con la naturaleza y crecimiento. Es ideal para empresas que se relacionan con el medio ambiente
Naranja. Refleja diversión, vitalidad y sociabilidad. Suele ser utilizado por empresas relacionadas con el entretenimiento o la comida
Morado. Representa riqueza, sabiduría, misterio. En el caso de una empresa podría transmitir un mensaje de exclusividad o de alto estatus.
Rosa. Relacionado con el amor, romance, paz. Lo usan empresas cuyo público objetivo son las mujeres jóvenes.
Blanco. El blanco representa simplicidad, pureza, verdad, limpieza, higiene. De ahí que sea utilizado por empresas relacionadas con la salud, y por aquellas que quieran proyectar simplicidad.
Negro. El negro representa poder, valentía, elegancia, sobriedad. En el caso de una empresa podría transmitir un mensaje de seriedad. En cuanto al marketing algunas empresas lo utilizan para enviar un mensaje de exclusividad, de estatus, de alta calidad, y también para añadir un toque de misterio.
Gracias a los colores los sentidos se estimulan y las personas crean asociaciones. Ahí, justamente, radica la importancia de elegir las tonalidades adecuadas para cada empresa. Deben ser colores que reflejen la identidad corporativa que se quiere proyectar y, para ello, se debe tener en cuenta el factor psicológico que tienen los colores.
Asimismo, de acuerdo a lo que cada color representa, cada empresa debe identificar su color adecuado para relacionarlo con el segmento meta a cual desea llegar y la forma en como en un futuro desea ser identificada.