Increíble pensar que en el hackeo Twitter intervinieron colaboradores de la misma compañía, cuando leí la noticia estaba impactada. ¿Cómo es que los representantes de una marca pueden hacer esto?, en verdad es inconcebible.

Los datos de ciber ataques son alarmantes y con la emergencia sanitaria que estamos atravesando se han incrementado. Según Edgar Juárez, de El Economista, “los ciberataques ya son una prioridad para las empresas en México. Tan es así que, de acuerdo con la consultora KPMG, el 80% de los consejos de administración de las firmas, considera que la ciberseguridad es un riesgo operativo”.

Sin embargo el tema de ciberseguridad no será el tema de esta semana, si no el tema de la ética en los colaboradores y cómo ante esta pandemia que se han perdido miles de empleos a nivel mundial, hay colaboradores que teniendo trabajo lo arriesgan y además ensucian la reputación de la marca.

Todos los colaboradores que trabajan para una empresa o que son dueños de su propia empresa deben tener claridad; que de una u otra manera se representa a la marca y que cada una de nuestras acciones puede afectar o mejorar la reputación de la misma. 

Juan Manuel Torres, de Deloitte, apunta que “es importante que las organizaciones, más que imponer un comportamiento ético, convenzan a sus empleados de vivirlo, es decir, pasar de la obligación a la convicción por voluntad propia”.

El caso de Twitter que se dio el pasado 15 de Julio fue trending topic y una noticia a nivel mundial por haber hackeado cuentas de Elon Musk, Bill Gates y otras personalidades. Aún se  sigue investigando pero lo que se sabe hasta hoy es que al parecer cuatro de los colaboradores de twitter participaron en este hackeo.

Me es muy difícil creer que tus propios colaboradores atenten contra de la empresa que les está dando trabajo y que además les da de comer para  poder vivir, sumado a esto ante una emergencia sanitaria. ¿Qué nos está pasando como sociedad? ¿Dónde queda la ética? ¿Dónde quedan los valores?

Creo que no hemos aprendido nada…

Como conclusión quiero dejarles este tema para pensar, no perdamos de vista lo importante de tener trabajo y hacer lo que te gusta debería ser suficiente para ser fiel a la marca.

También para las empresas creo que les queda de aprendizaje que hay que detenerse un poco y analizar mejor a los colaboradores para evitar este tipo de conductas.  Sobre todo los colaboradores que tienen acceso a información sensible y confidencial.

Obviamente esto no acaba aquí tal vez cuando se resuelva el caso los colaboradores se quedaran sin trabajo y ¿Quién los va a querer recontratar? ¿Crearan su propia empresa de hackers? Esta historia aún no acaba.

Los dejo con esta frase de Fernando Savater: “Después de tantos años estudiando la ética, he llegado a la conclusión de que toda ella se resume en tres virtudes: coraje para vivir, generosidad para convivir, y prudencia para sobrevivir”.