Todo negocio comienza pequeño, por medio de un fundador (o equipo de fundadores) que convierten su visión comercial en una realidad. Con el tiempo, el mismo evoluciona, agrega empleados y estos, se convierten en equipos. A su vez, los equipos se convierten en pequeñas unidades laborales que ayudan a la construcción de una organización y a expandirla en un mercado específico.
Si bien esta expansión ayuda al negocio a prosperar, también agrega otra capa de complejidad que puede causar fricción y algunos problemas para la empresa, ya que puede desestabilizar la manera en la que se hacen las cosas. Se tiene que asegurar que todos se dirigen en la misma dirección, pese a no ser parte del centro de operaciones principal.
Esta es una prueba común para cualquier empresa que haya pasado avante la etapa de inicio. Para las grandes empresas compuestas por miles de empleados, a menudo distribuidas en diferentes oficinas, zonas horarias e incluso continentes, puede llegar a ser mucho más impactante. De ahí que la coordinación efectiva y, sobre todo, la colaboración eficiente sea el factor determinante sobre el éxito o fracaso de todo negocio.
De acuerdo con especialistas de McKinsey & Company, en México, las empresas que cuentan de uno a nueve empleados, el indicador de productividad laboral es de 9.36 puntos, frente al promedio de 43.94; en las que tienen entre 10 a 49 trabajadores, el índice es de 26.72 puntos, menor al promedio de 54.09, y en las de 50 a 249 colaboradores es de 41.8 puntos, contra el promedio de 68.37.
Esto termina afectando a las grandes empresas, pues no consiguen proveedores eficientes y por consecuencia, no hay crecimiento.
RealBusiness detalla 3 razones por las que la colaboración es el centro de una organización
- Productividad importa
Todas las organizaciones tienen un interés fundamental en asegurarse de que sus empleados trabajen y se comuniquen entre sí de la manera más eficiente posible, ya que esto impacta directamente en la productividad del negocio, lo que finalmente genera o termina con el mismo. Con el auge de la digitalización y las tecnologías, emerge una nueva clase de plataformas para reclamar este espacio y esto es un punto importante, ya que las organizaciones no solo quieren alinear a todos los empleados detrás de un objetivo compartido: también buscan aprovechar el conocimiento.
- Conocimiento
Las organizaciones necesitan alejarse de las tecnologías heredadas y crear nuevos espacios virtuales agrupados en torno a tareas o proyectos que permitan que los equipos trabajen juntos de forma transparente. Estos canales de comunicación fomentan un enfoque colaborativo y, lo que es más importante, sirven como un creador de conocimiento que cualquier empleado, sin importar cuándo se unió a la empresa o al equipo, puede aprovecharlo para ponerse al día rápidamente.
Según informes, para el año 2025, estos canales de comunicación reemplazarán al correo electrónico como el principal medio de comunicación empresarial.
- Adaptación
Cualquier centro de colaboración debe ser escalable, flexible y personalizable para que las organizaciones puedan adaptarlo a sus necesidades específicas. Ya sea que una organización tenga 500 o 500,000 empleados, los centros de colaboración deben poder conectar a cada uno de ellos al principal canal de un compañía. Los centros de colaboración deben servir como el sistema nervioso central de una organización, alineando objetivos y compartiendo conocimientos, sin importar en qué lugar se encuentren.