• Se pueden considerar a los QR como la evolución del conocido código de barras.

• Al ser de código abierto es posible incrustar prácticamente cualquier tipo de información digital en ellos.

• Los códigos QR destacaron durante la pandemia ofreciendo un sin número de posibilidades mediante el uso de un smartphone

Las nuevas tecnologías con el paso de los años son cada vez más efectivas y sorprendentes, la vida cotidiana se ha visto modificada prácticamente desde su núcleo, ya que es más común el poder realizar prácticamente todo tipo de acciones desde sistemas y dispositivos electrónicos. La pandemia causada por el COVID-19 aceleró todo el proceso de modernización llevándolo a implementarse ya no como algo nuevo, si no, seria mejor dicho que instauró una nueva manera de vida cotidiana, donde todo es digital y a la distancia, donde todo es inmediato y modificable y a su vez con capacidades casi infinitas, siguiendo estos preceptos, la evolución del código de barras toma lugar en loas Códigos QR.

¿Qué es QR?

Se podría considerar a los códigos QR, también conocidos como Bidi, como similares o quizá la evolución de los códigos tradicionales de barra, siendo un módulo para almacenar información en una matriz de puntos bidimensionales. Al ser de lenguaje abierto es sumamente popular a nivel mundial desde su creación por la empresa japonesa Denso-Wave, subsidiaria de Toyota, que instauraron en las siglas debido que representan la palabra en inglés “Quick Response” o respuesta rápida por su traducción al español.

Este formato de códigos al ser de respuesta inmediata, cuenta con una capacidad de lectura a gran velocidad, con lo que los usuarios pueden tienen la posibilidad de acceder a datos e información relevante y precisa, todo esto desde su teléfono móvil, con la ayuda de alguna aplicación o directamente accediendo desde la cámara.

Uso cotidiano

Los códigos de formato libre QR, ofrecen una cantidad casi ilimitada de funcionalidades ya que pueden albergar diversos tipos de contenidos, la popularidad de este modelo de almacenamiento digital, se disparó a raíz de la pandemia y su uso se ha quedado en la cotidianidad de los usuarios volviéndose cada vez más popular.

Hoy en día este tipo de código se utiliza para ofrecer información sobre productos o servicios, ocupando como una herramienta de promoción y de mera información.

El enlace por lo general, incluye una dirección URL, el cual se encarga de redirigir a la página web destino, este proceso es hecho de manera automática, aunque existen códigos con los cuales se presentan textos informativos, menús y fotografía.

Existen variantes para el uso de los códigos QR, es posible programar en ellos casi cualquier tipo de información digital como, por ejemplo, números de teléfono, direcciones, programar funciones de mensajería con respuestas preestablecidas, adjuntar un CV o cualquier tipo de información y hasta métodos geolocalización o videos interactivos.

La evolución es constante y el código QR, afianzó su mortalidad en el uso cotidiano debido a la gran capacidad de posibilidades que alberga, a la tendencia de su uso al evitar el contacto físico y el reducir las cantidades de papel y plástico, sustituyendo todo por código que brinda el mismo contenido pero de forma eficaz, limpia e instantánea, ya que actualmente un gran porcentaje de la población cuentan con un smartphone con cámara, lo cual es lo único que se necesita para acceder a todo el contenido que ofrecen este método de re dirección y almacenamiento digital

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