-
La palabra aguinaldo significa, literalmente, regalo de Navidad
-
Se cree que su origen está en la expresión latina hoc in anno, “en este año”
-
En América Latina es donde adquiere su significado como un pago a trabajadores
Hay varios conceptos e ideas que están ligados a las fiestas decembrinas. En términos de marketing, significa que todas las marcas lanzarán anuncios y campañas para colgarse de la temporada. Para muchos negocios, también implica aumentar sustancialmente las ganancias que perciben por sus ventas. Por supuesto, evoca además sentimientos de cariño, empatía, afecto, comprensión y felicidad en familia. En México, aparte es la temporada del aguinaldo.
Notas relacionadas
- ¿Cómo gastan los consumidores mexicanos su aguinaldo?
- Cómo aprovechar el aguinaldo: 5 formas de invertirlo
- Aguinaldo: Cuánto te corresponde y cómo gastarlo sabiamente
Pocas prestaciones en México causan tanta expectativa como el aguinaldo. Marca recuerda que se trata del pago equivalente a 15 días de sueldo base, que deben pagarse antes del 20 de diciembre para los trabajadores del sector privado. Según Mejores Empleos, esto significó una derrama económica de 129.3 billones de pesos en 2018. Y en cifras de Imagen, muchas de las personas decidirán invertir al menos el 16 por ciento en comprar bebidas alcohólicas.
Éste dato es solo una muestra de uno de los grandes problemas del manejo del aguinaldo en México. Muchas personas no saben tener una buena gestión de este ingreso adicional, por lo que en la mayor cantidad de los casos termina por despilfarrarse. O peor, al ser destinado a compras a crédito, incluso puede provocar problemas financieros. Por ello, en un comunicado, Alpha Credit apunta que hay cinco recomendaciones para tener una mejor gestión de éste:
No gastar todo el aguinaldo
Si bien parece una idea relativamente simple, muy poca gente de hecho sigue este consejo. Como la gente percibe esta prestación como un ingreso adicional, suelen emplearlo para darse pequeños lujos o gustos que a lo mejor no podían en el transcurso del año. Aunque no tiene nada de malo usar los recursos para permitirse cosas que un presupuesto más ajustado no dejaría, también es poco aconsejable despilfarrar todo. Ahorrar es una muy buena opción.
Pagar las deudas primero
Es importante no dedicar todo el aguinaldo a compras impulsivas y lujos porque puede servir para cumplir con pequeñas responsabilidades financieras. Si la gente tiene créditos o pagos pendientes, emplear parte de este ingreso no solo les dará tranquilidad económica. También ayuda a mejorar su calificación en el Buró de Crédito. Y en el caso de tener compromisos retrasados, será crucial para reducir la presión que provocan los intereses por morosidad.
Apartar parte del aguinaldo para contingencias
Como ya se dijo antes, este ingreso adicional puede ser excelente para iniciar un pequeño fondo de emergencias. Siempre es conveniente que las personas tengan a la mano algo de dinero en caso de que sucedan imprevistos. Por ejemplo robos considerables, gastos médicos, sobrevivir durante el desempleo, etcétera. Gracias a que este pago es visto como un “extra”, bien puede destinarse a empezar a construir una reserva para los momentos difíciles.
Invertir en proyectos productivos
La mejor forma de hacer crecer el patrimonio es a través de estas herramientas financieras. El ahorro por si mismo solo permitirá a la gente reunir dinero, que irá perdiendo valor con la inflación y otros factores. Pero al ponerlo “a trabajar” en cuentas de banco, portafolios, o hasta iniciativas como comprar y poner en renta una casa o negocio, permite aumentar el bienestar de las familias. Y el aguinaldo, por su tamaño considerable, es perfecto para esta meta.
Divertirse con el aguinaldo
No todo tiene que ser precaución y pensar en el futuro. La gente también tiene derecho a darse lujos en las fiestas y esta prestación es perfecta para ello. De nuevo, lo importante al momento de gastar este dinero es tener una buena gestión del mismo. Si se tiene una correcta distribución y una buena planeación a futuro, no solo se podrán cosechar los beneficios en unos años. También habrá amplio margen para empezar a disfrutar en el presente mismo.