• El 67 por ciento de los encuestados por GoTandem apunta que no sabe cuándo volverá a la oficina

• Al mismo tiempo, más de la mitad de este grupo ya quiere volver a la oficina de su marca, pero tiene miedo al contagio

• Seis de cada diez personas en esta evaluación señalan que temen que sus compañeros no se cuiden lo suficiente

Los próximos serán decididamente difíciles para cualquier marca. Ya se están viendo una serie de problemas comunes entre las organizaciones más grandes. Ahí esta el ejemplo de Apple, que ha tenido que cerrar de nuevo más de una cuarta parte de sus tiendas por el rebrote del virus. También está HSBC, quién volvió a plantear el despido de decenas de miles porque no es suficiente volver a abrir. O Cinemex y Cinépolis, que van a cerrar complejos para siempre.

Uno de los desafíos más importantes para las empresas ha sido la coordinación con todo su equipo de colaboradores. De acuerdo con Ethix 360, cualquier marca debería de apoyarse de su personal para diseñar un mejor plan de regreso a las actividades. Law.com cree que el reto más importante está en crear una estrategia para asegurar que nadie ponga en riesgo su salud haciendo su trabajo. Y para EBN, la cuestión más urgente gira en torno al tema comunicación.

Esta última marca tiene razón. Es importante que los colaboradores tengan un canal abierto con la empresa para poder expresas sus preocupaciones e incertidumbres. Pero tal vez más importante aún, es fundamental que la compañía como tal se aliste para abordar de forma directa algunas de las dudas más comunes. De lo contrario, el proceso de reapertura puede ser más accidentado de lo que podría ser. En ese sentido, Tandem pone cinco ejes cruciales:

¿Cuándo volverá la marca a operación regular?

Tal vez la pregunta más importante y común que las compañías deben de resolver, no importa a qué ramo pertenezcan. Es crucial que la marca establezca un plan de regreso a las oficinas o al espacio regular de trabajo. Sin embargo, una vez que se tenga claridad sobre el tema, hay que comunicarlo a los colaboradores. Tal vez es innecesario informar de cada pequeño detalle y cambio. Pero sí es importante dar un aviso en cuanto la dirección llegue a una decisión clara.

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¿Será seguro regresar a las oficinas?

Aunque a muchas personas les urja regresar al espacio de trabajo regular, hay mucho más que temen las implicaciones sanitarias de que la marca vuelva a la normalidad. En este sentido, se debe de crear también un plan de protección y seguridad para la salud del personal y todos los clientes. Y, una vez que se tenga, comunicar las medidas que se esperan tener. Lo anterior implica el realizar capacitaciones y entrenamientos para que todo el mundo siga las reglas.

¿Quieren los empleados de la marca volver al espacio laboral?

Incluso si se tienen las medidas necesarias para prevenir contagios y hay una comunicación en torno a cuándo podría regresarse a la oficina, pueden haber dudas. Al final de cuentas, la pandemia aún está en proceso y la marca no puede negarlo. Así que vale la pena analizar qué tal está el ánimo entre los colaboradores sobre la reintegración a la nueva normalidad. Esto va a ser útil para tratar de mejorar las medidas de protección, cuidado y trabajo diario en el futuro.

¿Todos están siguiendo las medidas de protección?

Personalmente, muchos colaboradores en la marca van a tomar las máximas precauciones para evitar contagios una vez que regresen a la oficina. Pero eso no significa que todos así lo van a hacer. Además, es importante recordar que, para evitar contagios, todos deben de hacer su parte. En este sentido, es indispensable que la empresa misma cree reglas contundentes, las comunique y encuentre formas de fomentarlas y, si es el caso, multar su incumplimiento.

¿Podrá la marca volver en algún momento al home office?

Mientras que muchos individuos podrán detectar el trabajo convencional en la oficina como lo más práctico o lo preferible, es entendible que otros estén conformes con el trabajo remoto. Es importante que la marca considere que algunas personas podrían querer seguir con el formato de home office, parcial o permanentemente, a futuro. En este sentido, hay que medir qué tanto interés existe en torno al tema y tratar de crear un sistema que le sirva a la empresa y la gente.