De vez en cuando hay ciertas acciones y conductas que, de tanto repetirse, se vuelven fenómenos virales a través de las redes sociales, se trata de retos que la gente accede a afrontar, unos más curiosos e inteligentes que otros.
Por ejemplo, hace unos años surgió entre diferentes personalidades famosas el llamado Ice Bucket Challenge, que les comprometía a vaciarse un balde de agua helada a sí mismos. la razón, se dijo, era apoyar la lucha contra la esclerosis lateral amiotrófica… como si no bastara con hacer un donativo financiero a alguna institución de lucha contra esta enfermedad y como si el agua potable abundara en todo el planeta.
https://www.youtube.com/watch?v=3dbf6g46O4s
Pero han existido “retos” aún más patéticos, recientemente surgió el Tide Pod Challenge, que retaba a las personas a consumir cápsulas de jabón para lavandería y mostrarlo a través de redes sociales… el riesgo a la salud por la ingesta de este producto de la marca Tide no difícil de imaginar y seguramente no esto tan grave como otro reto que fue también muy estúpido: meterse preservativos por la nariz.
Hoy está en boga uno más de estos retos, el #ChonaChallenge, que se ha vuelto viral en las redes sociales y consiste en bajar del auto en movimiento y bailar al ritmo de una canción. El título surge de la canción La Chona, del conjunto musical mexicano Los Tucanes de Tijuana, que ha sido uno de los más socorridos para realizar este reto de baile.
El hecho es que, por la naturaleza de esta acción, se han presentado lesiones y se ha puesto en peligro la seguridad de terceros…
Por eso, en ciudades como Abu Dabi, capital de los Emiratos Árabes Unidos, se han presentado cargos contra diferentes personas que han demostrado realizar esta acción al publicarlas en sus redes sociales. Los cargos son, precisamente atentar contra los valores de la sociedad, violar la moral pública y poner en peligro su propia vida y las de las demás personas.
Se trata de atractivos fenómenos sociales que se proyectan a través de las redes digitales… francamente son acciones que poco aportan a las personas y sí ponen en peligro sus vidas y hacen pensar en que no siempre se emplean estas maneas de comunicación para fines positivos o constructivos.