• China habría estado promocionando sus vacunas como una opción viable para países en vías de desarrollo y las naciones en los Balcanes

• Por su lado, Rusia incluso ha sugerido públicamente que se podrían usar sus avances para mejorar otras fórmulas no tan efectivas

• Tanto en EEUU como en el bloque europeo ha sido cada vez más difícil luchar contra la desconfianza generalizada hacia las dosis locales

Si desconfías de las vacunas de AstraZeneca, Pfizer, Moderna o Johnson & Johnson, tal vez seas víctima de una estrategia de división de China y Rusia. Al menos así lo apunta un nuevo reporte de la Unión Europea (UE), retomado por Reuters. De acuerdo con esta investigación, tanto Pekín como Moscú han esparcido sistemáticamente desinformación y contenido para causar desconfianza a las fórmulas de Occidente. Esto, en un intento para generar división.

La UE agrega que medios estatales de ambas naciones habrían distribuido varios artículos en múltiples idiomas exagerando las preocupaciones de efectos secundarios de estas vacunas. También habrían reportado, falsamente, una relación entre las dosis y algunas muertes de pacientes. Además, constantemente habrían colocado sus propias fórmulas como superiores. Tanto Rusia como China negaron terminantemente estas acusaciones del bloque europeo.

Entre los ejemplos que puso la UE sobre la campaña de desinformación de Rusia y China, está la situación de la vacunación en Reino Unido. Medios en Rusia dijeron que el Brexit salvó al público británico del “caos que envuelve a Europa”. Según autoridades del Viejo Continente, éste es un claro ejemplo de cómo se pretende sembrar divisiones en la región. Tanto Pekín como Moscú han acusado al bloque europeo de usar estos reportes para difundir fake news.

Vacunas, un tema que también es político

No es la primera vez que se acusa a estos países de estar detrás de campañas de desprestigio y desinformación en torno a las vacunas. En marzo, CNN reportó que Estados Unidos (EEUU) acusó a Rusia de tratar de incrementar dudas hacia la fórmula de Pfizer. Específicamente, se habría tratado de crear una aversión ante su costo y seguridad. Esto, al tiempo que se ponía a la fórmula Sputnik V como una opción superior para proteger al mundo de la actual pandemia.

Notas relacionadas

Nuevos modelos de negocio para Uber: Citas para vacunación y renta de automóviles

Países que producen la mayor cantidad de vacunas contra COVID-19

Ejemplo para el resto de las compañías: Apple ayudará a sus empleados a recibir sus vacunas

Lo mismo ya ha ocurrido antes con China. De acuerdo con Politico, a inicios del año varios medios asiáticos controlados por Pekín empezaron a correr historias sobre las vacunas de Pfizer y Moderna. En muchos de estos artículos, incluso calificaban la fórmula como algo potencialmente mortal para los pacientes. Algunos incluso acusaban a los medios de EEUU de solapar los fallecimientos que presuntamente sucedieron después de la aplicación de dosis.

Y ambas naciones tienen una razón muy clara, política, para sembrar esta discordia sobre las fórmulas de Occidente. De acuerdo con DW, tanto Moscú como Pekín han usado sus vacunas para incrementar su influencia global. Esto también explica por qué han estado tan dispuestos a ceder y vender sus fórmulas a países en todo el mundo, aún cuando sus poblaciones todavía no están protegidas. Bien pueden volverse los “salvadores” del planeta con estas acciones.

México, justo en medio

Las advertencias de la UE son especialmente importantes para muchos países que no están tan afiliados a EEUU, o que han ido alejándose poco a poco en los últimos años. México se puede considerar en este último grupo, y hay muestras claras de la popularidad que han ido ganando las vacunas rusa y china en las últimas semanas. Desde finales del año pasado que varios agentes locales reconocían a Sputnik V como una de las fórmulas más eficaces.

Por otro lado, las vacunas de China también están convirtiéndose en un factor importante para la campaña de protección en México. CanSino, por ejemplo, está impulsando la protección del personal educativo, algo que el gobierno federal quiere completar lo antes posible para que se pueda volver a clases presenciales. Por otro lado, Sinovac también ha logrado ganarse varios adeptos, aún cuando estudios demuestran que no es tan efectiva que las fórmulas de EEUU.