El volumen de exportaciones de China hacia Rusia crece frenéticamente mientras el bloqueo occidental afecta al país de Vladimir Putin y Europa y Estados Unidos compran menos productos chinos por la crisis.

En octubre, según los últimos datos de comercio bilateral entre ambos países, el envío de productos desde China a Rusia se potenció en línea con el debilitamiento de la demanda de artículos del gigante de Asia en otros grandes mercados, como el europeo y el estadounidense.

En paralelo, las importaciones desde Rusia se desaceleraron con respecto al mes anterior.

Según las últimas estadísticas chinas, la entrega de productos del país de Xi Jinping a Rusia aumentó un 34,5 por ciento en términos interanuales, muy por encima del 21 por ciento de incremento que se había anotado en septiembre.

Octubre marcó el cuarto mes seguido de aumento por encima del 10 por ciento en el comercio bilateral entre ambas potencias, según datos de las aduanas chinas analizados por Reuters.

Rusia necesita productos y China se los vende

El aumento de las exportaciones de China a Rusia se contrapone con la baja en la demanda de artículos chinos en el resto del mundo, especialmente en los países europeos y los Estados Unidos.

En estos países, la alta inflación, el incremento general de las tasas de interés y la desaceleración de la economía mundial han golpeado la demanda y, en consecuencia, las importaciones desde el gigante asiático.

El aumento de los envíos de productos hacia Rusia desde China creció incluso con las nuevas restricciones vinculadas a los brotes de covid en Shangai y otras ciudades y a la débil demanda interna del país de Putin por las consecuencias de la guerra.

En este contexto de relaciones bilaterales entre Rusia y China hay que analizar la comunicación que la semana pasada se produjo entre un alto diplomático chino, Wang Yi, con su par ruso, Serguéi Lavrov.

Según se dio a conocer, en ese encuentro, China le dijo a Rusia que está dispuesta a fortalecer la relación en todos los niveles, y que cualquier intento de impedir el progreso de las dos naciones nunca tendrá éxito.

El comercio bilateral se incrementó hasta los 153.900 millones de dólares en el período de enero a octubre, más de un 33 por ciento que en los mismos meses de 2021.

Cuando Xi Jinping y Putin se vieron las caras por última vez, allá por febrero de 2022 en Beijing, en los Juegos Olímpicos de Invierno, proclamaron que su amistad “no tenía límites”. Desde entonces, Rusia ha buscado estrechar sus lazos con el gigante asiático, mientras la Unión Europea y Estados Unidos responden a la invasión con una oleada tras otra de sanciones.

China ha evitado con mucho cuidado violar las sanciones occidentales o entregar apoyo militar de manera directa a Moscú, pero la relación comercial está en crecimiento: Rusia necesita de forma desesperada nuevos mercados y China (con una economía diez veces mayor que la de Moscú) va por materias primas a precio de oferta.

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