Las últimas noticias que se tuvieron del Acuerdo Transpacífico de Asociación Económica (TPP, por sus siglas en inglés) fue que Estados Unidos y Chile se salieron, mientras que Australia y Nueva Zelanda instaban a Japón y China y no salirse del tratado, mientras que México buscaba invitar al vecino país a reintegrarse, hasta que China reveló sus intenciones de reactivarlo.

La actual administración de Estados Unidos decidió también cuestionar y renegociar el Tratado de Libre Comercio con América del Norte (TLCAN) con Canadá y México, al considerar que su país perdía ganancias, mientras que nuestro país aprovechó para pedir al vecino país que retome elementos del TPP en la nueva negociación del TLC.

Ahora, China parece haber escuchado las súplicas de Australia y Nueva Zelanda, ya que ahora busca llenar el espacio que dejó Estados Unidos, al explorar un acuerdo de libre comercio con Canadá, mientras que con México ya plantea una “asociación estratégica”.

Para analistas de Wall Street, el mal trato de Estados Unidos hacia México como socio comercial solo propicia que nuestro país impulse un acuerdo de libre comercio con China por separado o como parte del TPP, incluso ya señalan la situación como “China card”.

El protagonismo de China ya incomodó a Japón, quien antes había rechazado el TPP de forma tajante, y ahora ha tenido que rectificar al referir que “retomará las conversaciones”, mientras Chile ya está modernizando su TLC con el país asiático.

De acuerdo con Bloomberg, China está tomando paulatinamente el papel de Estados Unidos, al menos en América Latina, pues recientemente invirtió en un costoso sistema de monitoreo espacial en la Patagonia.

Por su parte, el secretario de Economía (SE), Ildelfonso Guajardo, apuntó “México está harto de escuchar que roba puestos de empleo a Estados Unidos, por lo que buscaremos opciones comerciales con China”, y enfatizó que nuestro país es parte de la solución competitiva de Estados Unidos y China.