Shigenori Shiga, CEO de Toshiba, presentó este martes su renuncia debido a las pérdidas multimillonarias que la empresa estima por la devaluación de su rama de energía nuclear en Estados Unidos.
La tecnológica japonesa tenía previsto presentar sus resultados correspondientes a los primeros nueve meses del ejercicio fiscal 2016, pero la publicación fue pospuesta un mes por problemas en la auditoría de sus cuentas.
La decisión de Shiga dejó claro que asume “la responsabilidad por la gestión” que desencadenó el deterioro de los activos de su rama nuclear estadounidense, Westinghouse Electric, a raíz de su adquisición a finales de 2015 por la constructora CB&I Stone & Webster.
Shigenori Shiga seguirá siendo un ejecutivo hasta que la junta de accionistas se celebre en junio. Toshiba espera registrar una pérdida de 6 mil 300 millones de dólares de su negocio nuclear de Estados Unidos., destacó la cadena NHK.
El objetivo del aplazamiento es investigar posibles manipulaciones contables en su filial estadounidense. Varios abogados y auditoras ya están trabajando en ello, dijo Toshiba.
En concreto el grupo investiga las circunstancias de la compra por parte de Westinghouse de la compañía CB&I que fabrica plantas nucleares. Desde el accidente nuclear de Fukushima, en 2011, la normativa de las centrales ha sido revisada y el coste de los proyectos se ha disparado, algo que Westinghouse no habría evaluado correctamente.
Para evitar la insolvencia a finales de este año fiscal, Toshiba tiene que pagar las deudas mediante la venta de activos, o añadir equidad a través de financiación o dar beneficios a finales de marzo.
La empresa ya ha decidido vender su negocio de chips y anunció que considerando la venta de una participación mayoritaria, por lo que varios inversionistas potenciales han hecho ofertas.