México se prepara para la Fase 3 de la epidemia. A finales de marzo, a pocos días de que la Organización Mundial de la Salud (OMS) declarara iniciada la segunda fase de contagio para México en medio de la pandemia de coronavirus, Andrés Manuel López Obrador, presidente de la República Mexicana indicó que la Fase 3 de contingencia iniciará el próximo 19 de abril.
Ante esto, desde la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), han indicado que el mayor número de contagios podrá registrarse entre el 6 y 13 de mayo, con lo que se llegaría al peor momento de la cantidad de contagios en el país.
De esta manera, se espera que a partir de esta fecha se registrará un mayor número de casos de contagio por día, en donde los riesgos y desafíos serán importantes para el sector salud.
Deficit en sector salud
EL principal reto al que se enfrentarán la instituciones de salud pública será cubrir el deficit de camas y personal médico que algunas instituciones, antes de la pandemia, ya habían reportado.
Basta con reconocer que, a decir de los datos entregados por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), en el país hay 1.5 camas de hospital por cada 1,000 habitantes, la recomendación del organismo internacional es de 4.7 unidades por cada 1,000 personas.
A esto se suma el hecho de que en el país la población paga gran parte de sus tratamientos de salud, aspecto que ahora con una cadena de valor visiblemente afectada, presenta un panorama complejo.
De acuerdo con la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS), 43 pesos de cada 100 pesos que se destinan a tratamientos de salud provienen del gasto de los hogares mexicanos, lo que supone el doble del promedio de la OCDE. Esto toma mayor relevancia si consideramos que, a decir de la asociación antes citada, los pacientes que se han atendido por coronavirus en instituciones privadas han gastado en promedio cerca de 283 mil 591 pesos.
De centro de convenciones a hospital
Entendiendo esta situación y las carencias, el centro de convenciones Citibanamex, ubicado en la Ciudad de México, será habilitado como hospital temporal para atender a 854 pacientes que requieran oxigenoterapia.
Con esta medida, en la que se involucraron tanto el gobierno federal, la UNAM así como la iniciativa privada se espera evitar la saturación en el sector salud.
En un comunicado conjunto, los involucrados en esta iniciativa indicaron que “en apoyo a la estrategia nacional ‘Todos Juntos contra el COVID-19′, el Centro Citibanamex se habilita como Unidad Temporal COVID-19 con el objetivo de atender a pacientes leves y moderados de esta enfermedad, así como coadyuvar a disminuir la eventual saturación en hospitales del sistema de salud de la Ciudad de México”.
Empresas involucradas y su rol
En ese sentido, se detalló que la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) estará a cargo de las decisiones técnicas, médicas y hospitalarias para los trabajos de habilitación del complejo, mientras que el sector empresarial apoyará con recursos para el correcto funcionamiento de este hospital temporal.
De esta manera, el 50 por ciento de los recursos para habilitar el centro de convenciones como unidad médica vendrá de las fundaciones Carlos Slim, Telmex-Telcel e Inbursa, mientras que otras marcas como CIE, Walmart México y Centroamérica, Bimbo, Barcel, Fundación Sertull, Citibanamex, Fundación Alfredo Harp Helú, Fundación Coca Cola México, Coca Cola FEMSA, Goldman Sachs, Codere, HSBC y Coppel, participarán como una donación de 700 millones de pesos.
Esta medida se suma a lo sucedido en otras partes del mundo, en donde muchas marcas y empresas pusieron a disposición de las unidades médicas sus recintos para instalar unidades médicas para atender a los miles de contagiados de COVID-19.