En el mundo de las monedas de colección, el Centenario de oro mexicano ocupa un lugar especial. Su alta pureza, valor intrínseco y facilidad de almacenamiento la han convertido en un objeto de deseo para coleccionistas e inversionistas por igual.
Sin embargo, esta preciada pieza no se ha salvado de la piratería, pues a través de internet se venden “réplicas” del Centenario a precios irrisorios.
AliExpress: Un bazar de falsificaciones
AliExpress, el gigante chino del comercio electrónico, se ha convertido en un caldo de cultivo para la venta de productos falsificados, y las monedas no son la excepción. En esta plataforma, se pueden encontrar réplicas del Centenario de oro -entre otras monedas de metales preciosos o bullions- a precios que oscilan entre los 13 y los 87 pesos mexicanos.
¿Oro o latón?
Si bien algunos vendedores en Aliexpress aseguran que sus piezas son de “chapa de oro”, no se ofrecen detalles que comprueben la veracidad de esta afirmación.
Por ejemplo, uno de los vendedores asegura que la réplica del centenario que ofrece tiene una chapa de oro, con un precio normal de 125.46 pesos menos 30% de descuento.
En muchos casos, las monedas están hechas de latón o algún otro metal barato y simplemente pintadas de dorado para imitar el brillo del Centenario original.
Piratería china: Un problema global
La asociación de productos chinos con la piratería no es nueva. La falta de protección de la propiedad intelectual en China ha permitido que empresas sin escrúpulos copien productos y marcas sin autorización, inundando el mercado mundial con falsificaciones de todo tipo.
En plataformas de comercio electrónico como Aliexpress o Temu es común encontrar este tipo de productos que son falsificaciones de las marcas originales.
Si bien no todo lo chino es falsificado, es importante tener cuidado y evitar caer en las trampas de la piratería.
El país también produce artículos legítimos y de alta calidad. Sin embargo, el problema de la piratería sigue siendo un tema importante que afecta a consumidores en todo el mundo, y es fundamental estar atentos para evitar caer en engaños.
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Características del Centenario de oro
El Centenario de oro mexicano es una moneda conmemorativa acuñada en 1910 para celebrar el centenario de la Independencia de México. Desde entonces, se ha convertido en una pieza codiciada por coleccionistas e inversionistas por su alto valor intrínseco, su belleza y su importancia histórica.
Diseño:
- Anverso: El Escudo Nacional Mexicano, con un águila devorando una serpiente sobre un nopal, rodeado por la leyenda “Estados Unidos Mexicanos” y el año de acuñación.
- Reverso: La Victoria Alada, una figura femenina que representa la victoria, parada sobre un nopal, con los volcanes Popocatépetl e Iztaccíhuatl al fondo.
- Metal: Oro puro de 900 milésimas (90% de oro puro).
- Peso: 37.5 gramos.
- Diámetro: 37 milímetros.
- Leyenda: “50 Pesos” en el borde inferior del anverso.
- Borde: Reededo (con estrías).
Debido a su valor, el Centenario de oro ha sido objeto de falsificaciones. Para autenticar una moneda, es importante prestar atención a los siguientes detalles:
- Peso y dimensiones: Las monedas originales tienen un peso y unas dimensiones específicas. Una moneda falsa puede ser más ligera o más pesada, o tener un diámetro diferente.
- Detalles del diseño: Las monedas originales tienen detalles finos y nítidos. Las falsificaciones pueden tener bordes borrosos, líneas irregulares o detalles poco definidos.
- Calidad del metal: El oro es un metal denso y brillante. Las monedas falsas pueden estar hechas de un metal menos denso o con un acabado menos brillante.
- Certificado de autenticidad: Si la moneda viene con un certificado de autenticidad, es importante verificar su origen y validez.
¿Dónde comprar un Centenario?
Los Centenarios de oro se pueden comprar a través de distribuidores de monedas de confianza, casas de subastas o en algunos bancos. Es importante comprar la moneda a un vendedor de buena reputación y solicitar un certificado de autenticidad.
El Centenario de oro es una excelente inversión debido a su valor intrínseco en oro. Además, su belleza histórica y su condición de moneda conmemorativa la convierten en una pieza codiciada por los coleccionistas.
