Luego de que cientos de dueños de restaurantes y cadenas del sector protestaran desde hace unos días para abrir sus locales en pleno semáforo rojo, las autoridades de la CDMX de la mano de Uber, Didi y Rappi parecen tener una solución.

Desde el fin de semana pasado, los dueños de negocios restauranteros de todos los tamaños comenzaron una campaña desde redes sociales en donde exigieron a las autoridades otorgar un permiso para abrir sus establecimientos en espera de la visita de comensales a partir de este lunes, de lo contrario, ellos abrirían sus puertas aunque el hecho se traducirá en multas.

Entre cierres y apps

Ante un diálogo que, al momento, no ha dado una solución concreta para ambas partes, muchos negocios debieron abrir sus puertas desde el medio día de ayer, lo que ahora ya cobra algunas multas y llamadas de atención.

Por ejemplo, la cadena de restaurantes Sonora Grill abrió y dijo por medio de su cuenta de Twitter que debido a la difícil situación en la que se enfrentan, “como personas y como gremio, Sonora Grill Group tomó la decisión de abrir”.

Luego de hacerlo el lunes, este martes una sucursal de la cadena tenían sellos de suspensión de actividades, según reportó Irene Muñoz en su cuenta de Twitter.

“El gobierno de la CDMX y Claudia Sheinbaum apoyan la informalidad y matan la formalidad. Mercados y fondas abiertos y protegidos por el gobierno, y restauranteros que sí pagan impuestos y empleo formal como Sonora Group son castigados por ellos”, indicó.

Lo cierto es que te tipo de situaciones podría ser la constante en días posteriores, con lo que las autoridades de la CDMX han comenzado a buscar aliados en las plataformas de entrega de alimentos a domicilio para frenar lo que, para muchos, se ha convertido en un acto de supervivencia.

En busca de acuerdos con Didi, Uber y Rappi

En conferencia de prensa se dio a conocer que autoridades del Gobierno de la Ciudad de México, se reunieron este lunes con representantes de Didi Food, Uber Eats y Rappi con el fin de invitarlos a mostrar mayor apoyo a los restaurantes, luego de que muchos negocios se quejaron de los altos porcentajes de comisión que cobran estas empresas.

El titular de la Agencia Digital de Innovación Pública, José Antonio Peña Merino, explicó que tras la primera reunión con Rappi, Uber Eats y Didi Food “encontramos una buena recepción, se comprometieron a revisarlo, entienden que son uno de los pocos sectores que no ha visto mermada su actividad económica durante los 10 meses (de pandemia)”.

Y es que el tema de las elevadas comisiones se ha convertido en un freno para que los restaurantes encuentren en las apps de entrega a domicilio un verdadero aliado para salir de crisis.

Datos publicados por Merca2.0 indican que en restaurantes de volumen medio Uber Eats cobra el 30 por ciento más el efecto de IVA es decir un costo real del 34.5 por ciento y Rappi 23 por ciento más IVA un costo real del 27.5 por ciento. En otras palabras de cada compra que haces en estos restaurantes Uber se queda con poco más de la tercera parte.

De las comisiones

La información ha sido confirmada por Uber, al indicar que el 30 por ciento, monto que es utilizado para generar demanda de pedidos (publicidad); pago de comisiones a los bancos; compensaciones eventuales a los usuarios, como reembolsos cuando el pedido no llega o llega mal; así como el funcionamiento y mantenimiento de la aplicación.

La marca ha informado que ningún socio restaurantero paga más de este porcentaje, al tiempo que detalló que aunque la comisión puede ser menor, dependiendo de las características de cada negocio, la realidad es que la mayoría de sus asociados paga esta cantidad.

Es importante mencionar que se estima que el 70 por ciento de los restaurantes afiliados a la plataforma son pequeñas y medianas empresas, las cuales tienen una influencia local. Estos negocios son los que suelen pagar hasta 30 por ciento debido que los gastos de promoción son mayores.