Brigitte Seumenicht

¿De qué forma podemos lograr impactar a nuestra audiencia con una excelente presentación? ¿Qué hace que algunas presentaciones sean mejores que otras? ¿Qué tenemos que hacer para lograr que nuestra audiencia no solo preste atención sino que se lleve la idea de lo que queremos transmitir?

¿Estás gastando demasiado en la renta de oficina? ¿Tus colaboradores pasan poco tiempo en el lugar de trabajo? ¿El giro de tu negocio implica estar en constante movimiento buscando o visitando clientes?

Hoy en día los clientes ya no solo eligen un producto, lo prefieren y lo compran, sino que en muchos de los casos se enamoran de el. De alguna u otra manera todos tenemos marcas por las cuales sentimos un cariño especial. Nuestros clientes cuando aman nuestro producto, servicio o nuestra marca se convierten en grandes embajadores de la misma y nuestros mejores publicistas.

Hace no muchos años hacer carrera en una empresa era el sueño de muchos graduados universitarios. Tener un empleo que garantizara una estabilidad no solo económica sino también profesional era parte de lo que se esperaba una vez que eligiéramos en qué empresa trabajaríamos.

Poco a poco comenzamos a ver como el tema de la generación de ideas, creatividad e innovación va tomando fuerza dentro de las empresas. Esto dado a que siempre existirá la búsqueda de soluciones intrépidas, creativas y originales que den solución a las diferentes problemáticas que toda empresa presenta.

Una de las características de la mentalidad emprendedora (y sobre todo de los soloentrepreneurs) es asumir riesgos y responsabilidades más allá de los límites. También resulta característico el querer controlar cada una de las actividades, así como en muchos casos, creer que nadie puede hacer las cosas de mejor manera.

En un ambiente tan competitivo como lo es el marketing, resulta cada vez más difícil poder diferenciarnos y ganar más clientes. Se nos presenta la oportunidad ante un buen cliente y debemos de hacer uso de todo tipo de estrategias de comunicación para venderle la idea de que nosotros seremos su mejor elección.

Estamos inmersos en el mundo laboral en un ajetreo constante. El tiempo apenas nos alcanza, no terminamos muchas veces lo que nos proponemos durante el día, y pocas veces disfrutamos de todo aquello que estamos realizando. Es esencial que hagamos una pausa y logremos identificar pequeños factores que podrían ayudarnos ha tener un cambio positivo en nuestro trabajo.