Esta campaña de ropa interior para mujeres basada en un NO rotundo al Photoshop ciertamente quitó un enorme peso de encima a muchos años de
Siempre comento eso de que ya no solamente lidiamos con nuestra identidad real, sino que ahora también administramos, cuidamos, descuidamos y tenemos toda una responsabilidad con la identidad virtual. Y en ese sentido, muchos egos descansan en las fotos y frases brillantes posteadas.
Sí, las redes son utilísimas para muchas cosas, y aunque esta expresión ciertamente suena a cliché, ahora sí me sorprendieron y en el ámbito personal. Aunque todos lo digan y suene obvio, las redes me salvaron de una crisis dolorosa y tremenda porque el sábado perdí a mi perro en el parque.
Los “cerebros” de la mercadotecnia, en su afán por elevar sus cifras, inventan cada cosa. Y es que hay resbalones de resbalones, pero francamente hay muchos tan absurdos que sólo pueden causar risa. Acá les dejo una reflexión fantástica sobre esas “ideas locas” que algunos crean para vendernos más y más.
Ya ni siquiera es necesario decidir una compra para tener el producto en las manos. Incluso va a ser suficiente con que el mercado sepa de tu curiosidad o interés por algo, para que seas rotulado de comprador o lo seas de antemano.
Empieza el año, y con él los buenos deseos y propósitos, y como siempre digo con pánico, también todo lo concerniente a nuestra identidad virtual que cada día nos ocupa más tiempo y espacio de vida. Me refiero a ese enorme cúmulo de “responsabilidades”.
El marketing de los gadgets y su incorporación hasta el alma y el vientre de los consumidores, quiero decir hasta hacer de los aparatitos elementos vitales, es toda una tendencia que cada día se fortalece.
Me llamó mucho la atención esta noticia que leí. Ahora resulta que nuestras propias redes nos delatan, somos sin lugar a dudas nuestros perfiles, ahí estamos plasmados aunque queramos ocultarnos. Dice la noticia que un sheriff en el condado de Palm Beach, Florida, encontró a través de las fotos de la página de Instagram del joven Dupree Johnson pruebas de sus delitos.
Les comparto este video que me llegó por alguna de las miles de vías que ahora nos vinculan a todos. Les confieso que a mí me dejó muy, pero muy pensativa.
Si hay una peste que hoy nos invade como una terrible –y hasta terminal- enfermedad contagiosa, silenciosa y más peligrosa de lo que se calcula es el estrés. El 80% de las personas lo padecen, perdón, lo padecemos.
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