Confieso que me causa curiosidad y hasta preocupación cuando veo a algunos amigos tomándose fotos a sí mismos, más aún cuando lo hacen repetida e insistentemente. Pero cuando las suben a las redes sociales si terminó por espantarme, y más cuando no es una foto de vez en cuando. Me preguntaba qué interés pueden tener los demás de ver fotos y fotos de uno, en la calle, sonriendo, en pose sexy, riendo, en la cama, en la ducha, en la alberca, en la…
Unas cuantas veces lo intenté, no quise quedarme atrás, me tomé una que otra foto y, la verdad, no soy nada fotogénica, además de que me gana la certeza de que nadie quiere ver fotos de mi sola, ¿para qué? Así como a nadie le interesa si desayuné un licuado, si me corté las uñas, si se acabó la leche de mi nevera, si me duele la cabeza o si amanecí triste.