- La estrategia de congelar los precios por una determinada cantidad de tiempo comenzó en Argentina, país con altos índices inflacionarios desde hace décadas.
- Con el aumento de los precios en Europa, Carrefour decidió llevar la campaña a Francia.
- En Argentina llegó a abarcar más de 1.300 productos por seis meses. En Francia se lanza esta semana con 100 artículos, por 90 días.
Desde hace más de cinco años, la cadena de supermercados de origen francés Carrefour implementa en Argentina la campaña de marketing y publicidad “Precios Corajudos“.
El programa busca sacar provecho del escenario inflacionario del país congelando los precios de un conjunto de productos por un tiempo determinado.
En 2017, por ejemplo, el hipermercado congeló por seis meses los valores de venta de 1.300 productos de marca propia de las 22 provincias argentinas donde está presente.
Fijó los precios el 7 de julio de 2017 ante escribano público y los mantuvo en todas las tiendas hasta enero del año siguiente.
No es una campaña simple en un país donde la inflación en ese año alcanzó el 25,7%.
La campaña se ha reeditado casi todos los años, con diferentes plazos y cantidad de productos. Y fue exitosa.
Exportación de estrategias de marketing
Con la inflación en Europa que avanza al 10% interanual, Carrefour decidió llevar a cabo la misma estrategia en Francia, donde este lunes 22 de agosto anunció que la marca congelará los precios de 100 productos de uso cotidiano por tres meses.
De acuerdo con el anuncio, no aumentarán de precios por 90 días productos como, arroz, detergente y sardinas en lata con la idea de ayudar a los consumidores a hacer frente a la inflación.
Las medidas se produjeron luego de que el viernes el Gobierno liderado por Emmanuel Macron les pidiera a las empresas que hagan “algo más” para frenar el aumento de los precios.
Carrefour dijo que congelará los precios hasta el 30 de noviembre en un listado que también incluye productos sanitarios de uso personal e indumentaria.
Inflación en Francia: qué hace Carrefour
Los últimos datos oficiales dicen que en Francia hay una inflación anual del 6,8 por ciento, una de las más altas desde que el país utiliza el formato estadístico de la Unión Europea.
Igualmente, es baja si se compara esa tasa con la de otros países de la región, como España o el Reino Unido, donde los precios subieron más del 10 por ciento.
En el caso de Francia, no se elevó más gracias a los topes del Gobierno en los precios de la energía eléctrica y el gas natural.
La inflación se ha disparado en todo el mundo tras la invasión rusa de Ucrania, que ha hecho subir el valor de venta de la energía, lo que se suma a las presiones sobre los precios que ya existían con la salida de la pandemia y los problemas en las cadenas de suministro.
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