El consumo de carne se convierte en un importante indicador económico y en muchos mercados es parte de una cultura de consumo, en la que juega un papel clave para el surgimiento de modelos de negocio basados en la oferta de este tipo de productos, ya sea como una forma de llegar a distintos segmentos de mercado o porque de manera histórica han basado el modelo de negocio en el ofrecimiento de dichos productos.
Las siguientes son tres claves para entender el mercado de carne y que te servirán si eres mercadólogo.
1. Conocer al consumidor
Si bien el mercado de carne tradicional sigue dominando ante la innovación con estrategias como la de elaborar carne en laboratorio o tendencias como la oferta de productos vegetarianos tipo carne, el consumidor del mercado tradicional de carne constituye un perfil que plantea a las marcas de la industria un estudio permanente, entenderlo desde sus preferencias y estilos de vida que marcan la oferta de productos y la forma en que los consume.
2. La carne como producto protagonista
Cadenas como McDonald’s han logrado diversificar la oferta de sus hamburguesas con tipos de carne que se diferencian por el tipo (Angus, por ejemplo), la cantidad (hamburguesas como la Big Mac cuentan con dos porciones de carne) y el origen (productos como los McNuggets, hechos a base de pollo).
3. Innovación con sabor
Marcas como la mexicana SuKarne han invertido en la innovación como una estrategia que ayuda a la reputación de sus marcas, sobre todo cuando se colabora con instituciones educativas como la UNAM, lo que abona en la percepción de su imagen y marca la diferencia ante otros competidores.