• La industria de la moda ha incrementado sus ventas y producción un 60 por ciento desde el nacimiento de las redes sociales.

• Carlings encontró la forma definitiva de crear prendas sin impacto al medio ambiente.

• Lee: Dove muestra como una marca puede actuar ante el coronavirus.

¿Habías considerado la relación que existe entre la contaminación de los océanos, las marcas de moda y las redes sociales? Pues la firma Carlings sí, y fue gracias a ello que generaron una campaña destacable que veremos en esta ocasión.

Como sabrás, existe un gran problema de contaminación en los océanos que ha surgido debido al exceso de plásticos, según datos de la organización Earth Day, cerca de 8 millones de toneladas métricas de este material llegan a los océanos de forma anual, y si se trata de señalar a los principales responsables, la industria de la moda no puede decir mucho en su defensa cuando surgen los datos duros. Tal como lo compartimos en una de nuestras gráficas del día, con cifras de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza, la principal fuente de procedencia de los microplásticos presentes en los océanos son los textiles sintéticos, mismos que son empleados por muchas firmas de moda en la actualidad. Con relación a esto, es que la firma Mckinsey Company señala también que la industria de la moda se ha convertido en la segunda más contaminante del mundo.

Desafortunadamente, aunque de forma interesante, el problema que ha generado de forma creciente el mundo de la moda también involucra a las redes sociales, pues, según la misma fuente, las ventas y producción de la industria de la moda han incrementado un 60 por ciento desde el nacimiento de las redes sociales. Las plataformas de social media han propiciado el crecimiento de la industria y por consecuencia han impulsado más contaminación pues en estos espacios sociales las personas han llegado a compartir sus outfits del día a día y están poco dispuestas a repetir el mismo atuendo en cada publicación que hacen en los distintos perfiles sociales que tienen. Este complejo problema, ligado al comportamiento actual de los consumidores en torno a las prendas de vestir, es la base que dio a la firma Carlings, y su agencia VIRTUE, la brillante idea de lanzar una colección de ropa digital bajo una campaña que titularon “adDRESS THE FUTURE”.

¿De qué se trata la campaña adDRESS THE FUTURE?

De forma general, el esfuerzo de Carlings se puede entender como la acción definitiva que pueden tomar las marcas en términos de soluciones sustentables para reducir el impacto negativo de la industria de la moda. Se trata de la creación de la primera colección de ropa digital con un impacto en el medio ambiente que equivale al cero por ciento, y esto se debe a que la agencia VIRTUE y ellos desarrollaron literalmente ropa virtual para consumidores jóvenes (de entre 18 y 25 años) que puede ser usada en las redes sociales para que muestren su creatividad con la moda sin dañar al planeta.

Tal como lo explica el video de la campaña, estas prendas surgen como una solución para la regla no establecida de que las personas (particularmente los jóvenes) no pueden ser vistas con el mismo outfit más de una vez; dato que se confirmó a través de un estudio de Barclaycard, el cual identificó que en mercados como el británico, hasta un 17 por ciento de los jóvenes que compran prendas por internet lo hacen para usarlas una sola vez, tomarse una foto para sus redes sociales y finalmente devolver la indumentaria. Con ello en mente, para la marca hizo sentido su propuesta pues estos mismos consumidores son personas que están conscientes y preocupadas por los problemas que enfrenta el medio ambiente.

Entrando en detalles, entre noviembre y diciembre del año antepasado, Carlings lanzó dentro de su tienda online la colección (Digital Clothing Collection) desde la cual solo se necesitaban seguir 5 pasos. El primero consistía en elegir un producto de esta colección, luego se cargaba la foto donde la persona aparecería portando la prenda, posteriormente se generaba el proceso de compra de la prenda, como ocurriría con cualquier otro artículo comprado por internet. Luego, el cuarto paso consistía en esperar pues un diseñador ajustaba la ropa a la imagen haciendo uso de la plataforma Marvelous Designer y finalmente la tienda compartirá la imagen editada con el cliente para que este la pudiera compartir en sus redes sociales. De esa forma la marca y su agencia lograron desarrollar una línea de ropa con nulo impacto negativo en el medio ambiente.

¿Qué logró adDRESS THE FUTURE?

En términos de resultados, la campaña de Carlings fue el motor para el lanzamiento de su tienda online y la convirtió en el sitio más innovador en este mercado en términos de soluciones sustentables a la crisis ambiental que enfrentan las firmas de moda. Los alcances de la campaña llegaron a nivel mundial siendo reportados en medios reconocidos como Hypebeast, i-D, PaperMag, Vogue y Wired. Además, se logró incrementar el tráfico al sitio un 56 por cuento y las prendas llegaron a consumidores de más de 30 países a lo largo del periodo de prueba.

Finalmente y de forma más interesante para los mercadóogos y publicistas, este esfuerzo logró llevarse un Gran Prix en la categoría Personalised Storytelling & Experience, así como un oro, plata y un broce en la pasada edición del Festival Cannes Lions.

Créditos de la campaña

Cliente: Carlings

Producto: Digital Clothing Collection

Agencia: Virtue

Director Creativo Ejecutivo: Morten Grubak

Director de Arte: Emil Kjems, Dimitri Werner de Paiva

Productor: Asbjørn Munk, Kirstine Kollerup

Coordinador de Postproducción: Kirstine Kollerup

Creative Technologist: Sahand Porkar

3D Clothing Design: Andreas Bjørn Ibsen

Copywriter: Joachim Ulrich