Esos días en los que todo el contenido que nos llegaba en redes sociales era elegido por nosotros está llegando a su fin. Primero Facebook, y ahora Instagram y Twitter modifican sus algoritmos en lo que parece ser una tendencia irreversible por controlar lo que llega a los usuarios de cada plataforma.
Todo empezó en agosto de 2010, cuando Facebook anunció su algoritmo al que llamó en ese momento “Edgerank”, inspirado fuertemente en “Pagerank” de Google. El polémico algoritmo de Facebook se ha hecho famoso porque limita el alcance orgánico de las publicaciones, al grado que en promedio en México las páginas logran llegar a no más del 2% del total de sus fans, lo que ha impulsado a invertir en pauta para lograr mayor alcance.
Algoritmo de Twitter
Desde el 2013, Twitter ha estado explorando caminos para lanzar un algoritmo que deje atrás el timeline de orden cronológico como había sido desde su nacimiento en 2006. En febrero de 2016 Twitter anunció que su timeline sufriría cambios al cambiar la forma como se desplegarán los tuits, pasando del orden cronológico habitual, a un orden basado en relevancia y afinidad de intereses.
Con este cambio, en el timeline ahora se dará prioridad a los tuits que vayan más acorde a los intereses de cada usuario, con base en las cuentas con las que interactúa, el tipo de mensajes con los que realiza alguna acción. Aunado a lo anterior, Twitter recopilará los mensajes más relevantes que se hayan generado desde la última sesión del usuario y se los mostrará con el rubro “Mientras no estabas”.
Lo anterior pudiera sonar bien, si consideramos que ahora veremos más contenidos afines a nosotros, pero al hacerlo sacrificaremos una de las grandes fortalezas de la plataforma, la inmediatez. Al entregar contenido más relevante, se da un desfase de tiempo para que lleguen esos tuits, de tal forma que podríamos llegar a lo que sucede con Facebook, donde un hecho que pasó por la mañana, podríamos verlo hasta la noche por la manera en que el algoritmo acomoda el contenido para mostrarlo.
No todo está perdido
Aunque no lo promueve, Twitter permite regresar al orden cronológico para seguir utilizando la plataforma como siempre, para ello se requiere hacer lo siguiente:
- Entrar a Twitter
- Ir a perfil y configuraciones
- Ir a Timeline, donde se puede deshabitar la opción “Muéstrame los mejores tweets primero”
- Guardar los cambios
Algoritmo de Instagram
Es curioso pero mucha gente no sabe que Instagram fue comprado hace varios años por Facebook, de ahí que algunos se sorprendan con la decisión de seguir los pasos de la red social.
Lo que muchos temían, hace unos días se confirmó, Instagram cambió su timeline cronológico por uno basado en algoritmos. El Director ejecutivo de Instagram dijo: “En promedio la gente se pierde alrededor del 70% de las fotos de su feed. Con este cambio queremos asegurarnos que el 30% que veas se al mejor 30% posible”.
Con esta actualización, Instagram decidirá cuales serán las fotos que se mostraran a cada usuario principalmente considerando la afinidad hacia el perfil, el histórico de interacciones, y los intereses o gustos de cada usuario. Si acostumbramos ver fotos de paisajes, con este cambio nos mostrará primero las fotos que haya de paisajes.
Aún quedan varias dudas en cuanto a la la forma como su algoritmo determinará qué, cómo y cuando mostrará el contenido, pero todo parece indicar que funcionará de manera muy similar a como trabaja el de Facebook.
De acuerdo a las declaraciones de directivos de Instagram, este cambio será gradual, por lo que la agonía por la perdida de “likes” tardará todavía unas semanas.
Como una medida desesperada, ha surgido una supuesta solución a este tema por parte de grupos de usuarios, donde sugieren activar las notificaciones para no perder detalle cuando mis amigos publiquen algo. Esto en realidad no cambia nada, porque al final de cuentas timeline sigue funcionando como el algoritmo decide, pero nosotros nos llenamos de notificaciones que seguramente no daremos seguimiento por el volumen.
El conocimiento que no se comparte, pierde por completo su valor