La caĆda de Whatsapp de este miĆ©rcoles, que duró mĆ”s de dos horas y afectó a miles de millones de usuarios que el servicio tiene alrededor del mundo, tuvo un ganador (ademĆ”s de Telegram, claro). Se trata de los ciber delincuentes y los cazadores de datos, que aprovechan cada oportunidad que tienen para llevar adelante sus acciones.
En este caso, se trata de un mensaje que se comenzó a viralizar luego del regreso de la popular aplicación propiedad de Facebook. Apenas āvolvió a la vidaā uno de los mensajes mĆ”s compartidos, especialmente en Argentina, indica que los servidores de Whatsapp estĆ”n al lĆmite de su capacidad y que por eso se estĆ” limitando al mĆ”ximo la cantidad de nuevos usuarios.
El engaƱo intenta convencer a los usuarios diciendo que si no se reenvĆa el mensaje a āal menosā 10 contactos, deberĆ”n comenzar a cobrar por la app como una forma de ālimitar las descargasā y ādescongestionar los servidoresā.
Definitivamente los especialistas en el robo de datos vieron una oportunidad única. Whataspp tiene en el planeta (según Statista) casi 1.250 millones de usuarios y, con una gran parte de ellos (o quizÔs todos) con problemas durante horas, es bastante lógico que creyeran lo del problema.

El mensaje tambiĆ©n apela a utilizar un nombre propio, en este caso una supuesta directora de Whatsapp llamada Karelis HernĆ”ndez. Esta estrategia es habitual. La idea es dar la impresión de que la fuente es alguien real, de carne y hueso, lo que suma credibilidad (y vĆctimas).
De mƔs estƔ decir que Karelis HernƔndez no es la directora de Whatsapp, sino que el mƔximo CEO de la app es Jan Koum.
¿Qué hay que hacer? Nada. No hay que hacer caso al aviso y eliminarlo. Lo mejor, ademÔs, es no reenviarlo con la idea de alertar a otros porque lo único que se obtiene es viralizar aún mÔs el engaño.
Estafas en Whatsapp, siempre listos
Un caso similar se dio en 2016, ni bien Whatsapp actualizó su app para poder realizar videollamadas. Casi al instante, comenzó a circular un mensaje que, maliciosamente, buscaba robar datos instalando un troyano. Como pasa habitualmente con este tipo de engaƱos, la modalidad era prometer activar la funcionalidad si previamente el usuario compartĆa un enlace fraudulento entre sus allegados.
Unas semanas antes, una modalidad similar afectó la imagen de la aerolĆnea Latam (ex TAM). De la misma forma, un supuesto sitio oficial de la aerolĆnea en realidad redirigĆa a los usuarios a una pĆ”gina que no guardaba relación alguna con la compaƱĆa y que lo Ćŗnico que buscaba era robar datos.