El periodista estadounidense Michael Wolff afirmó este lunes aquí que “cada día más gente” en Estados Unidos ve en el presidente Donald Trump “a un experimento fracasado”, cuyo caso deja como lección a los ciudadanos saber mejor lo que debe votar en cada elección.
Al presentar la edición en español de su libro “Fire & Fury”, descartó que el actual mandatario vaya a trascender más allá de este mandato, que incluso corre el riesgo de no terminar ya sea por la vía de impugnación o porque él renuncie.
En una conversación con el editor de política de Bloomberg, Ben Sills, Wolff expuso que a Trump “le encanta amenazar con fuego y furia”, pero al ser “incapaz de leer y escuchar”, no se puede concentrar en la cantidad de información que implica emprender una guerra.
De hecho, consideró que en el apartado de guerras será por mucho mayor el impacto de lo realizado por George W. Bush (2000-2008) que lo que pueda realizar Trump, incluso a pesar del tono que utiliza para amenazar a otros países.
Recalcó que el presidente estadounidense se aburre cuando sus jefes militares presentan informaciones en Power Point, se levanta y se sale de las reuniones, y al parecer sigue en el cargo porque siente que es su deber.
“Trump rompe con la idea que se tiene de un presidente”, dijo Wolff que resaltó que sus colaboradores y personal de la Casa Blanca “pasaron por una transición de confianza a confusión, desilusión e incredulidad”.
“Cada día más gente ve que Trump es un experimento fracasado y que los políticos habituales no eran tan malos. Se ve ahora que había virtudes en las disciplinas tradicionales de la política”, manifestó.
Indicó que analizar lo que va del periodo Trump deja como lección “algo que tiene que ver con el riesgo que se corre como votantes. Él era el riesgo y ahora se ve lo que pasa cuando se tira lo que había para elegir al que es totalmente diferente”.
“Tenemos que tener cuidado con lo que deseamos”, expresó Wolff, quien consideró que el ex operador de campaña de Trump, Steve Bannon, podría seguir un proyecto político de derecha más elaborado que el del gobierno actual.
Tras seguir 18 meses a Trump, su campaña y posterior llegada a la Casa Blanca, refirió que la rapidez con la que sus principales colaboradores salieron de sus puestos no se había visto nunca, y ahora son sus familiares y líderes republicanos los que han ocupado más espacios de poder.
Refirió que con la salida de Bannon del gobierno son los líderes republicanos que se alzaron con la victoria del paquete fiscal en el Congreso, aunque alrededor del mandatario son la pareja de su hija Ivanka y su esposo Jared Kushner quienes ejercen una importante influencia.
Subrayó que muchas de sus acciones, como las relacionadas con la trama rusa que se les investiga, muestran que actúan “a trompicones, como delincuentes de bajo monta que viven el presente y en una estupidez increíble”.
Señaló que en el caso de la trama rusa es posible que no se les acuse de conspiración, sino de obstrucción a la justicia, y que esa podría ser la conclusión del fiscal especial.
Asimismo, con eso y un posible triunfo de los demócratas en las elecciones intermedias de octubre próximo es más real la posibilidad de ir al proceso de destitución presidencial (“impeachment”), o bien que se vea obligado a renunciar al cargo.