Las compañías de transporte bajo demanda, Uber y Cabify alistan aumentos a sus tarifas, que irán del 15 al 20 por ciento, que aplicarán en los próximos días, aunado a que en los pasados bloqueos por el gasolinazo aplicaron su tarifa dinámica.
De acuerdo con Uber, sus tarifas subirán para sus modalidades uberPool, UberX, UberBlack, UberXL y UberSUV, mientras que Cabify alista un aumento también, luego de que se anunciara un aumento a las gasolinas del 20 por ciento. Se trata del tercer aumento de tarifa de Uber.
Sin embargo, la compañía norteamericana ha sido, de nueva cuenta, la ganadora de las circunstancias, ya que en 2014 ajustó su tarifa, de 3 a 7 pesos, mientras que el minuto un peso con 80 centavos.
Después de una reunión con autoridades del gobierno de la Ciudad de México, la compañía aumentó de nueva cuenta su cuota por motivo de “cuota de solicitud”, además de cargos “por otras contribuciones”, sin explicar de qué se trataba, pero trasladó la cuota a los usuarios, quienes tuvieron que pagar 5 pesos y 60 centavos.
Por su parte, Cabify es otro ganador de las circunstancias, pues al aterrizar en nuestro país funcionó a la sombra de Uber, hasta que éste subió las tarifas fue cuando se posicionó como alternativa, aunado a los casos no aclarados de extravíos de pertenencias, quienes acusan ya no recibir sus cosas, ni contar con el respaldo íntegro de Uber.
Según declaraciones del director de Cabify, Alejandro Sisniega, al portal Expansión, la compañía cerró el 2016 con 800 mil usuarios mensuales, que es siete veces más que en 2015.
Otra de las estrategias de Cabify ha sido personalizar el servicio, como programas viajes, hacer acuerdos con otras compañías, como el Club Premier Aeroméxico, lo cual les permitirá sumar kilometros por cada viaje.
Los avances de Cabify apuntan a un segmento premium, ya que durante 2016 lanzaron su servicio Shuttle, que consistía en trasladar a los usuarios desde el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) a cualquier punto de la Ciudad de México o Estado de México por un costo de 95 dólares por persona por un máximo de tiempo de 10 minutos.
La apuesta de Cabify sobre la de Uber, ha sido de bajo perfil, pero segura, sin llamar demasiado la atención, pues no han requerido reuniones con la Secretaría de Movilidad capitalina (Semovi) para aclarar tarifa alguna.