En un movimiento sorpresivo, BK Brasil, la compañía que tiene a su cargo las operaciones de Burger King en la mayor economía de Latinoamérica, adquirió todo el negocio local de Domino’s Pizza.
De esta forma, pasará a liderar el atractivo segmento de mercado de la comida rápida en Brasil por cantidad de puntos de venta y por volumen de ventas. Impresionante movida.
BK Brasil ya tiene bajo su paraguas a la cadena de pollo frito Popeye’s en ese mercado, por lo que con la reciente adquisición abarcará a los tres principales mercados de comida rápida: hamburguesas, pizzas y pollo frito.
La novedad produjo casi de inmediato que las acciones del grupo crecieran más del 8 por ciento en 24 horas.
Burger King, comprada hace poco más de una década por 3G Capital, el holding de inversiones de origen brasileño y estadounidense, está llevando a cabo una fuerte campaña de expansión en la economía más importante de América Latina.
Según los medios brasileños, la venta ya es un hecho. La empresa vendedora, que hasta ahora tenía los derechos sobre Domino’s Pizza, es Vinci Partners.
De acuerdo a los términos que se han dado a conocer de manera extraoficial, la compra implica el desembolso de 650 millones de reales, lo que equivale a casi 120 millones de dólares.
Domino’s es en la actualidad el líder en el negocio de las pizzerías en Brasil, con 320 puntos de venta. De ese total, poco más de 200 están dentro del modelo de operación franquiciado y el resto son establecimientos propios.
El liderazgo es tal que por cantidad de sucursales supera a Pizza Hut y a la tercera del mercado, juntas.
Con esta novedad, BK Brasil tendrá ahora 1.220 establecimientos en Brasil, sumando los de Burger King, Popeye’s y Domino’s Pizza, y superando a McDonalds, que tiene 1.029 locales de venta de comida rápida.
Burger King, Popeye’s y Domino’s Pizza
Por otra parte, BK Brasil sumará una franquicia que es un éxito en Brasil.
Mientras que los ingresos del holding cayeron 21 por ciento en 2020 golpeado por la pandemia, la facturación de Domino’s no sólo creció, sino que formalizó la apertura de más restaurantes.
Esto se logró porque esta franquicia está mucho más adaptada al mundo digital que Burger King y que Popeye’s en Brasil.
Los cálculos que hizo Domino’s Pizza antes de esta compra hablaban de llegar a tener 1.000 restaurantes en Brasil en los próximos 10 años, lo que lo convertiría en la mayor marca de comidas rápidas del país.
En Brasil, el mercado de la venta de hamburguesas es el más relevante, con un negocio de más de 3.100 millones de dólares anuales. El de las pizzas es el segundo y el de pollo frito el tercero, pero viene creciendo al 15 por ciento anual.