La mañana de este jueves en el Reino Unido no fue una mañana convencional. Esta vez no se trataba de nada relacionado con el Brexit ni con algún tipo de atentado (por fortuna). En esta ocasión, la novedad llegó desde el Palacio de Buckingham, la residencia real en Londres, a donde la Reina Isabel llamó de urgencia (fue por la madrugada) a una reunión de todo el personal, de todo el país.
Mientras “Buckingham” se hacía tendencia mundial, los medios ingleses comenzaron a especular respecto de una noticia que muchos aseguran llegará este año: la abdicación de Isabel (91) en favor de su hijo, el príncipe Carlos (68), eterno aspirante al trono.
Sin embargo, mientras en las redes sociales ya se debatía sobre qué haría Carlos si fuese rey de Inglaterra, se confirmó que la novedad tenía que ver con el duque Felipe de Edimburgo, marido de Isabel II, quien “decidió que no participará en más actos públicos”, según se anunció oficialmente.
En esta decisión, el duque, que el mes que viene cumple 96 años, “tiene todo el apoyo de la reina”, dice el comunicado difundido a los medios a través de Twitter. La noticia puso fin a varias horas de especulaciones e incertidumbre.
“El príncipe Felipe (…) no aceptará nuevas invitaciones para visitas y compromisos, aunque puede decidir acudir a ciertos eventos públicos de vez en cuando”, precisa la nota, que añade que el marido de Isabel II es “patrón, presidente o miembro de más de 780 organizaciones, de las cuales va a seguir formando parte, aunque ya no tendrá un papel activo en sus compromisos”. “Su majestad continuará manteniendo los compromisos de su agenda, con el apoyo de los miembros de la Familia Real”, concluye el comunicado que reprodujo El País.
The Warner Stand at Lord’s @HomeOfCricket is officially opened by The Duke of Edinburgh pic.twitter.com/9tMKvIAYLm
— The Royal Family (@RoyalFamily) 3 de mayo de 2017
Las especulaciones sobre la abdicación de Isabel tienen que ver con que la monarca es la más longeva en la historia británica y la jefa de Estado de mayor edad de todo el mundo. En diciembre, de hecho, estuvo más de 10 días sin participar en ningún acto público y las versiones sobre su estado de salud fueron muchas.
Tantas fueron las especulaciones entre el anuncio de la reunión este jueves por la madrugada en UK hasta que se efectivizó varias horas más tarde, que desde el propio Buckingham debieron salir a decir que no había “motivos para alarma” y que no se trataba de “ninguna muerte”, aseguró una alta fuente a la agencia Reuters.
70 años juntos
La reina Isabel y el príncipe Felipe se conocen desde que Isabel tenía 13 años. Se casaron el 20 de noviembre de 1947. “A los 95 años, el príncipe conseva su humor y nadie duda de que es el miembro más políticamente incorrecto de la familia real británica. La izquierda británica lo tiene por un racista sin remedio que no se da cuenta de que sus pesadas bromas ponen en evidencia al país. La derecha lo considera un librepensador al que le trae al pairo la corrección política”, dice El País.
Una interesante forma de ver quién es Felipe de Edimburgo es a través de la primera temporada de The Crown, en Netflix. Allí se muestra cómo Isabel II llegó a ser reina de Inglaterra y su relación con su esposo.