• La equidad de género es un tema que ha ganado relevancia en aspectos como ciencia, tecnología, economía o política.

• Una de cada tres mujeres que manejan un negocio creen que su género es una barrera para el crecimiento.

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Terminar con la brecha de género es una de las preocupaciones actuales en empresas y negocios. Pensar en la contribución de las mujeres en diferentes industrias, como la ciencia, tecnología, ingeniería o matemáticas es una realidad cada vez más aceptada.

Estimar el tamaño de la brecha de género bien documentada en la ciencia ayuda a saber cuánto tiempo tomará para cerrarse. Lo cierto es que el número de mujeres en los artículos científicos debería ser igual al número de publicaciones por parte de los hombres, situación que no pasa en la actualidad.

La importancia sobre la brecha de género ha sido mayormente reflejada en regiones como Reino Unido, donde, incluso, se celebra el “Ada Lovelace Day “, que busca “crear nuevos modelos a seguir para las niñas y las mujeres” en diferentes campos y áreas relacionadas a la ciencia o tecnología.

De acuerdo con un análisis de estudios de los últimos 15 años, al ritmo actual de cambio, las mujeres alcanzarán a los hombres en 16 años, pero esa estimación general enmascara una gran cantidad de variación. Por ejemplo, las autoras superan en número a los hombres en solo un puñado (incluyendo enfermería y partería) y publican al mismo ritmo en solo 23 sectores, incluida la psicología, nutrición y salud pública.

La física, las matemáticas o la informática, no solo tienen los sesgos masculinos más altos, ya que las mujeres son superadas en número por seis, sino también las tasas de mejora más lentas. Se estima que sectores como la física, la brecha de género puede tardar 258 años en cerrarse por completo.

Lo peor es que los estereotipos se replican. Sin embargo, gracias a los datos ya se puede decir, por ejemplo, que el rumor de que los niños se desempeñan mejor que las niñas en matemáticas es falso.

Según un nuevo estudio de investigadores de Stanford, una de las perspectivas más completas sobre la brecha de género, basada en 260 millones puntajes en exámenes estandarizados para estudiantes de tercer a octavo grado, indican que tienen la misma disposición y afinidad a la materia.

Otro estudio incluyó los resultados de los exámenes para 10 de 12 mil distritos escolares en Estados Unidos y en ninguno de ellos, los promedios estaban equilibrados en materias como inglés o artes.

Aunque en matemáticas casi no hay brecha de género, en promedio. Las niñas tienen un rendimiento ligeramente mejor que los varones en aproximadamente una cuarta parte de distritos, especialmente en aquellos que son predominantemente afroamericanos y de bajos ingresos.

En un extraño intento de resaltar el sexismo sistémico, en Italia, el investigador Alessandro Strumia provocó que más de 1,600 científicos firmaran una petición condenando su afirmación de que la física haya “inventada y construida por hombres”.

Otro ejemplo: las cofundadoras de la startup Witchsy expusieron el sexismo en el sector tecnológico de Estados Unidos, creando a “Keith”, un tercer fundador ficticio. El hecho de hacer que un “hombre” asumiera toda la correspondencia con la comunidad tecnológica provocó un cambio inmediato en la forma en que desarrolladores y diseñadores trataron a su negocio.

Actualmente, se demuestra que el equilibrio de género sigue favoreciendo a los hombres. Por ejemplo, en Reino Unido, las mujeres solo tienen el 15 por ciento de los roles de gestión. Mientras tanto, solo el 26 por ciento de las compañías especializadas en ciencias o tecnologías han alcanzado el objetivo de incrementar la participación femenina.

Además, casi una de cada tres mujeres que manejan un negocio creen que su género es una barrera para el crecimiento, en comparación con solo el uno por ciento de hombres. Las oportunidades de creación de redes que favorecían a los hombres y las dificultades para acceder a la financiación también se mencionaron como un desequilibrio de género en las industrias.